"Nos tenemos que preparar para evitar la próxima crisis” ha asegurado Michel Camdessus, exdirector gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) y presidente del Observatorio de Microfinanzas del Banco de Francia durante la conferencia “La salida de la crisis a Europa: ¿en qué puede contribuir el microcrédito?" organizada conjuntamente por MicroBank, la Bolsa de Barcelona y Barcelona Centro Financiero Europeo.

Teniendo en cuenta que la crisis ya “está detrás nuestro”, según Camdessus quien se ha autodefinido como “un europeo muy convencido”, tenemos que reconsiderar las estrategias de política económica. Después de las previsiones poco optimistas del informe del FMI en un contexto "dramático" escrito por personas que “no quieren crear más pesimismo” y “que cruzan los dedos y rezan a los dioses para que pase alguna cosa”, Camdessus se ha mostrado partidario de utilizar las divisas, los presupuestos y las políticas monetarias así como cualquier otro instrumento disponible para intentar estar lo mejor posible.

El Nobel de la Paz

El exdirector del FMI ha reiterado la importancia de romper con la a menudo mala interpretación del organismo internacional y las profecías de autorrealización que impulsan dinámicas negativas de los mercados mediante la profundización de los microcréditos creados en Bangladesh por el ganador del Premio Nobel de la Paz de 2006, Muhammad Yunus quien consiguió emprender “uno de los inventos más espectaculares de los últimos decenios por conciliar banca y preocupación social.” Más concretamente, ha destacado la experiencia de MicroBank en tanto que banco europeo más grande dedicado a los créditos sociales con un límite máximo de 25.000 euros por personas con difícil acceso a la financiación. Camdessus ha definido la entidad como “la heredera de la tradición social de la Caixa más eficiente” que cree en tanto en sus clientes emprendedores como en su relación próxima con los trabajadores de la entidad como principal aval para a la baja morosidad. Se trata de pasar de gente que busca trabajo a gente que genera ocupación.

El microcrédito es una contribución “totalmente inclusiva” del modelo de desarrollo europeo, que según Camdessus, es rico y adelantado a la vez que tiene un alto grado de pobreza y exclusión financiera y bancaria. En cifras, la población en riesgo de pobreza en Europa asciende a 80.000 millones, lo que supone prácticamente un 17% de la población total. Este hecho evidencia que la teoría de crecimiento no se reparte equitativamente, por lo que se tienen que encontrar instrumentos para romper estas dinámicas y conseguir que “la gente trabaje y mejore su calidad de vida.”

 

Economía con preocupación ética

La sociedad está cambiando y eso requiere también un cambio de paradigma. El exdirector del FMI ha explicado que no tiene por qué ser necesariamente un abandono de la economía de mercado pero sí una economía con una preocupación ética mayor que enfatice todo aquello cualitativo con respecto a la reducción de desigualdades y creación de igualdad de oportunidades e ingresos. El objetivo es promulgar la inclusión de los más pobres, tal y como ya están realizando una gran variedad de Instituciones especializadas en microcréditos y financiación a pequeña escala.

Camdessus también ha asegurado que “la supervivencia de todos implica resolver los problemas sociales”. Y por eso, conviene acompañar a las personas y ayudarlos a superar los obstáculos financieros. Uno de los colectivos con más dificultades ha sido el de las mujeres emprendedoras, sobre las cuales ha explicado que han conseguido desarrollar su independencia gracias, en parte, a los microcréditos.

Por último, el exdirector del FMI ha aconsejado en Europa que no se precipite a la hora de unificar y que espere a ver cuál es el crecimiento de cada una de las regiones que la integra, respetando siempre la gran diversidad de economías. Una paciencia que no debería olvidarse nunca de las necesidades de las personas.