Una de las leyes más importantes que aprobó el Govern en la última legislatura fue la que regulaba el precio de los alquileres. Poco después de su aprobación, la ley fue recurrida por el PP ante el Tribunal Constitucional español, que la admitió a trámite, y por lo tanto ahora mismo se encuentra en fase de deliberación.

Esta es la misma situación que sufrió la ley de los alquileres de Berlín, que jurídicamente es una ciudad-Estado, aprobada en febrero del 2020. Ahora bien, los trámites del TC alemán han ido más rápidamente y este jueves la ha derogado, situación que se podría repetir con la ley catalana.

En su resolución, el TC alemán considera que los länder no son competentes para hacerlo y que la autoridad competente es el gobierno federal. El Tribunal también argumenta que los länder solo podrían regular los alquileres en caso de que el gobierno federal "no haya hecho un uso final de su competencia legislativa".

La congelación de los alquileres entró en vigor hace poco más de un año, el 23 de febrero de 2020, con el objetivo de frenar el gran aumento de los precios en la ciudad. La ley fijaba un precio máximo de 9,8 euros por metro cuadrado y afectaba a los contratos de más de un millón y medio de viviendas de la ciudad-Estado de Berlín. Ahora bien, a diferencia de la ley catalana, la berlinesa estaba pensada como un dispositivo temporal, de 5 años, con el objetivo de reequilibrar el mercado de los alquileres.

Poco después de su aprobación, los grupos de la CDU y de los liberales, que conforman la oposición en la capital alemana, llevaron la ley al TC alegando que las competencias sobre el alquiler las tiene el gobierno federal. Finalmente, el Constitucional les ha dado la razón porque ha impugnado la ley, precisamente por este hecho.

Ley catalana

¿Ahora bien, qué regula exactamente la ley catalana de limitación de los alquileres? Pues el objetivo principal de la norma "es regular la contención y moderación de rentas en los contratos de arrendamiento de vivienda". Las viviendas que serían reguladas por estas medidas son las que consten como "residencia permanente del arrendatario" y que formen parte de un "área declarada con mercado de vivienda tensa".

La regulación de esta nueva ley implicaría limitar los precios de alquileres a partir de dos directrices: no podrán superar los índices de referencia de la Generalitat y tampoco podrán ser más altos que los de los contratos anteriores. Ahora bien, este índice de referencia se podría incrementar o minorar en un 5% si las partes lo acuerdan y la vivienda cuenta con tres de las siguientes características específicas: ascensor, aparcamiento, muebles, calefacción o aparato de aire acondicionado, zonas comunitarias de uso compartido como jardín o terrado, piscina comunitaria, servicios de conserjería y vistas especiales.

Los índices de referencia se pueden encontrar en un buscador habilitado en la página web de la Agència de l'Habitatge de Catalunya, donde se puede calcular el importe introduciendo la dirección del piso que se quiere alquilar, la planta, la superficie de la vivienda, el año aproximado de construcción y el estado de mantenimiento. También hay otras variables, como por ejemplo si la vivienda dispone de ascensor o está amueblado.