La tasa de actividad entre los jóvenes ha caído de forma significativa al Estado después de la crisis, y ha pasado del 70% del 2007 al 53% de este año, es decir, que la mitad de los menores de 30 años están fuera del mercado laboral, según un estudio que ha publicado este viernes el Banco de España. La mayoría de jóvenes que decidieron retrasar la entrada al mercado laboral o salieron por las dificultades se dedicaron a mejorar su formación, cosa que se evidencia por el hecho que el porcentaje de jóvenes inactivos que estudian ha aumentado desde el 25,3% del 2007 hasta el 38,7% del 2018.

Aunque estos datos impliquen que los jóvenes entran más tarde al mercado laboral, el organismo supervisor apunta que los menores de 30 años están más formados que las generaciones anteriores y que la disminución de la tasa de actividad podría compensarse con un incremento de la productividad en el futuro.

El supervisor asegura que el alargamiento del periodo formativo de los jóvenes ha venido acompañado de una mejora de su nivel educativo, aunque la tasa de abandono escolar se mantenga elevada. El porcentaje de jóvenes que han obtenido como máximo un título de educación secundaria se ha reducido desde el 36,5% hasta el 23,3% entre el 2007 y el 2019.

Gran parte de esta disminución se traduce en el aumento de la proporción de jóvenes que tienen titulación universitaria (del 23,1% al 33,9%), mientras que el tanto por ciento de jóvenes que acabaron formaciones terciarias subió del 11,5% al 15,9% en el mismo periodo. Por otra parte, la proporción de menores de 30 años que ni estudian ni trabajan es de 1,1 millones, 600.000 personas menos que al máximo alcanzado en el 2012, de 1,7 millones.

Este escenario, según el Banco de España, se puede trasladar en mejores resultados laborales, ya que las tasas de paro son más elevadas en individuos con menos formación. "Parece que la recuperación actual está asentada sobre un patrón que, a diferencia de lo que pasó en la anterior expansión, no está incentivando a los jóvenes a salir del sistema educativo", apunta al ente. Con todo, asegura que la disminución de la tasa de actividad podría verse compensada por incrementos de actividad y de productividad de esta generación en el futuro.