El juzgado mercantil 9 de Barcelona ha condenado a los hermanos Joan y Josep Font, accionistas únicos de Bon Preu, a reanimar 580.000 euros a cada uno, que habrían cobrado de manera indebida, según ha adelantado hoy La Vanguardia y ha podido confirmar la ACN.

Según el relato de los hechos, Joan Font, actual presidente del grupo, el año 2014 se atribuyó una remuneración de 580.000 euros sin autorización de la junta. El hermano protestó, pero el año siguiente habría hecho lo mismo. El año 2016, Josep Font interpuso una demanda social de responsabilidad contra Joan Font, el cual también lo demandó.

Ahora la jueza ha sentenciado que los dos hermanos actuaron de manera "negligente" y causaron un daño a la empresa por haberse quedado con los fondos. Joan Font y Josep Font supuestamente habrían pactado las remuneraciones, pero la jueza no ha dado validez a este pacto tácito entre los dos hermanos.

La sentencia no es firme y los interesados podrían interponer un recurso. De su lado, desde Bon Preu se considera que es "un tema personal" entre accionistas.