El Govern aprobará el martes que viene un decreto ley que permitirá al Ayuntamiento de Barcelona limitar el precio de los alquileres en aquellos barrios de la ciudad donde se han disparado por la escasa oferta, siguiendo un modelo de regulación de arrendamientos que Alemania aplica desde hace 30 años.

La consellera de Justícia, Ester Capella, se ha reunido esta mañana con los responsables del Col·legi Oficial d'Agents de la Propietat i de l'Associació d'Agents Immobiliaris, Gerard Duelo y Joan Ollé, para darles cuenta de la normativa que prepara el Govern. Los tres han coincidido en la "necesidad y urgencia" de regular los arrendamientos.

El Govern, según ha explicado la consellera, ha decidido acelerar la regulación de los alquileres anunciada hace meses y en su reunión del martes que viene tiene previsto aprobar un decreto ley que permitirá limitar los precios, mientras prepara el anteproyecto de ley de arrendamientos, que incluirá estas medidas y además alargará la duración de los contratos e impedirá fianzas abusivas.

Zonas de alta demanda o con precios desorbitados

En el caso Barcelona, la ciudad catalana más afectada por elevado precio de los alquileres, la Generalitat tiene previsto cederle la competencia de establecer limitaciones, de acuerdo con un índice de referencia de precios, en aquellos barrios calificados de "zonas tensas", donde se considere que son desproporcionados o que existe un alta demanda acreditada de viviendas.

Capella ha destacado que, para regular los precios de los alquileres, el Govern ha optado por basarse en el sistema alemán, "con 30 años de experiencia", porque "no se puede seguir asumiendo unas subidas de precios que no se ajustan a la realidad social ni a los salarios de las personas". "Estamos en una situación de urgencia", ha añadido.

Con la nueva normativa, que implicará a las conselleries de Justícia y de Territori, será la primera vez que Catalunya regule directamente los alquileres de viviendas, de acuerdo con artículos del Código Civil catalán que así lo permiten. En este sentido, Capella ha reivindicado las "competencias propias" de Catalunya y, después de insistir en que la Generalitat "no renunciará nunca a su autogobierno", ha reclamado "lealtad" al Gobierno y al futuro ministro del ramo para respetar esta regulación, que a su parecer va "más allá" de la que aprobó el 3 de abril pasado el Congreso de los Diputados.