La Generalitat abandonará el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) en enero de 2019. Así lo ha anunciado el vicepresidente del Govern, Pere Aragonès, en una entrevista en la ACN. El conseller de Economía ha asegurado que Catalunya avanza hacia la "sostenibilidad financiera" y que, a partir de ahora, se acogerá en el Fondo de Facilidad Financiera, como a paso previo para financiarse en los mercados. Aragonès ha asegurado que esta decisión es una "señal de la salud financiera" de la administración. Por otra parte, el vicepresidente confía al aprobar los presupuestos de la Generalitat, a la vez que ha descartado elecciones anticipadas: "No me resigno a una prórroga todo el año".

En declaraciones a la ACN, Aragonès ha sentenciado que el cambio del FLA por el Fondo de Facilidad Financiera dará a Catalunya "más libertad" ante un Estado que "siempre ha utilizado esta cuestión para rescentralitzar políticamente". El vicepresidente ha detallado que este paso es gracias al "buen trabajo" anterior para ajustar las cuentas al déficit, reducir el desequilibrio y los plazos de pagos a proveedores. Aragonès ha apuntado que el cambio llega después de una resolución a favor por parte del ministerio de Hacienda de hace unas semanas. Fuentes de la conselleria han explicado a la ACN que, lo más relevante, es que a partir de ahora cambiará el control económico sobre la Generalitat.

Presupuestos 2019

Con respecto a las cuentas del Govern, Aragonès se ha mostrado convencido de que los presupuestos se podrán aprobar tarde o temprano. Después de rechazar que pueda haber elecciones anticipadas al Parlament, el vicepresidente ha afirmado que no se resigna a una prórroga todo el año: "No contemplo en ningún caso el escenario de no tener los presupuestos", ha aseverado, aunque la Generalitat empezará en el 2019 sin unas cuentas nuevas.

El conseller de Economía ha defendido que se está trabajando en unos "buenos" presupuestos para el país, que corrigen "muchos de los déficits" que había antes en materias de enseñanza, seguridad, salud, emergencias o nuevas inversiones y la recuperación del espacio de 0-3 años, de manera que "no tendría que haber fuerzas progresistas que no participaran del acuerdo". Así, confía en que PSC-Units y CatECP acaben dando luz verde a las cuentas.

Sobre la CUP, lamenta que los anticapitalistas se nieguen a debatir los números, aunque mantiene la puerta abierta por si al final se suman a la negociación: "La CUP forma parte de esta mayoría que aprueba propuestas de incremento del gasto, y estaría bien que también formara parte de la mayoría del presupuesto". "Se han descartado, pero la puerta está abierta, aunque priorizamos negociar con las fuerzas con predisposición a negociar", ha admitido.

Aragonès ha reiterado que el Govern dará luz verde a los números una vez haya acuerdo para aprobarlos, a posteriori, en el Parlament: "Iniciar un debate presupuestario sin tener garantizada la aprobación sería una temeridad que, lo que haría, sería impedir la aprobación definitiva de las cuentas", ha reflexionado. Así, el conseller ha apuntado que el ejecutivo será prudente: "Preferimos esperar unos días más o pocas semanas pero tener garantizada la tramitación, que llevar los presupuestos al Parlament sin acuerdo, y condenarlos al rechazo".

Con todo, Aragonès ha destacado que las cifras con las que trabaja el Govern permiten, en términos de gasto corriente, superar los números del 2010 en ámbito social: "Revierten los recortes, volvemos a las cifras de antes de la crisis, y con un déficit 40 veces inferior, por lo tanto son sociales y equilibrados", ha hecho notar.

Techo de gasto

Finalmente, el vicepresidente ha negado que aprobar el techo de gasto en el Congreso sea ningún acercamiento para negociar las cuentas del Estado. En la entrevista, Aragonès ha defendido que lo que se ha hecho es aprobar unos nuevos objetivos de déficit que van más allá del techo de gasto del Estado para el 2019, y también de la Generalitat, con dos décimas más: "La situación ahora es diferente [respecto del gobierno del PP], la propuesta es más sólida y dos décimas más para Catalunya son 484 MEUR, que permiten más margen de maniobra", ha justificado.