Después de un año y medio y seis prórrogas para los ERTE de fuerza mayor a causa de la pandemia de la Covid, el presidente de la CEOE, Antoni Garamendi, ha deseado este martes que la prórroga aprobada en el Consejo de Ministros hasta el 28 de febrero "sea la última" tal y como los conocemos ahora.

En declaraciones a la prensa Garamendi ha asegurado que los ERTE han sido una buena "herramienta" para evitar el paro y ha recordado que en marzo había 3,5 millones de personas en ERTE y ahora hay unas 260.000, con lo que se ha demostrado que "funcionan" y están aquí para quedarse, pero ha comentado que a medida que cambie la situación, tendrán que ser "de otra manera".

De hecho el presidente de la patronal española ha añadido que en algún momento los agentes sociales tendrán que volverse a sentar para negociar a ver cómo en un futuro estos ERTE "se modifican o no", porque siguen siendo una herramienta para luchar contra el paro, ha asegurado.

La importancia de la nueva prórroga

El presidente de la CEOE ha destacado la importancia de la nueva prórroga de los ERTE hasta finales de febrero, antes de Semana Santa, porque hay sectores, como el turístico, todavía muy afectados por la crisis, la inclusión de los autónomos en el acuerdo o los ERTE especiales para Canarias, por los efectos que está teniendo la erupción del volcán de La Palma para su economía.

De hecho, Garamendi ja lamentado que se haya esperado tanto en llegar a este nuevo acuerdo, ya que "siempre llegamos al último minuto del partido con la lengua fuera" y, aunque no se haya levantado el veto a los despidos, ha asegurado que, nos guste o no, las empresas van a tener que reestructurarse en algunos casos.

La subida del salario mínimo no es buena para economía

Garamendi también se ha pronunciado sobre la subida del salario mínimo insistiendo en que ahora no es era el momento de aprobarla porque "no es bueno para la economía y va a generar más economía emergida". En esta línea el presidente de la patronal ha asegurado que no entiende por qué el Gobierno ha implementado ahora esta medida, ya que, a su juicio, "no es el momento" porque hay muchos sectores "muy tocados".

Además, ha añadido que hay empresas grandes, medianas y pequeñas con contratos con las administraciones públicas donde "no tiene sentido" que el salario mínimo crezca un 30 % en los últimos 3 años y que esos contratos sigan blindados. "Se traslada a la parte privada lo que la pública no quiere hacer", ha sentenciado.

Con la aprobación de hoy por parte del Consejo de Ministros, el salario mínimo pasará a ser de 965 euros brutos a 14 pagas, es decir 13.510 euros brutos anuales. De hecho, hay que recordar que la patronal no participó del acuerdo, que lo firmaron solo, el gobierno español y los sindicatos mayoritarios.

Esta nueva subida del SMI se encuentra en el rango mediano del tenedor de entre 12 y 19 euros recomendada por la comisión asesora y hay que recordar que es una alza que los sindicatos consideran insuficiente, pero que han aceptado porque el gobierno español se ha comprometido a continuar subiéndolo los próximos dos años para situarlo en el 60% del salario medio al final de la legislatura.