Foment del Treball y Cecot, finalmente, han hecho las paces y vuelven a sumar. Las dos patronales han iniciado "una nueva etapa" para profundizar en la unidad de acción entre las dos entidades después de la reincorporación de los vallesanos como asociados. Así lo han anunciado este martes sus presidentes, Josep Sánchez Llibre y Antoni Abad.

Sánchez Llibre ha explicado que "se ha puesto el contador a cero y dejado de lado las discrepancias" que llevaron a la expulsión temporal de la Cecot hace un año. Por su parte, Abad ha prometido que vuelven con voluntad de trabajar y que no serán invitados a Foment. "En el acuerdo hay un planteamiento de futuro. Las desavenencias han quedado sanadas", ha dicho Sánchez Llibre, que ha reconocido que, después de un año de ruptura "había dos partes heridas".

Incorporación en los órganos directivos

Desde este martes, la Cecot volverá a reincorporarse a los órganos ejecutivos, que se modificarán en la próxima asamblea de Foment para permitir que haya más miembros al consejo y a la junta directiva. "Si queremos incorporarlos, tienen que estar en los órganos de dirección", ha dicho Sánchez Llibre.

En una rueda de prensa donde los presidentes de las patronales han exhibido complicidad, Sánchez Llibre se ha congratulado de haber cerrado los problemas con la Cecot, "uno de los dos temas abiertos" que se encontró una vez accedió a la presidencia del ente, hace cinco meses.

Las diferencias con Pimec

La otra problemática que el presidente de Foment ha heredado con el cargo es el conflicto con Pimec sobre la representatividad patronal. Sobre esta materia, el presidente de Foment ha admitido que tener en Cecot de nuevo como asociado "ayuda", pero niega que en ningún caso, este haya sido el motivo de la reconciliación entre organizaciones patronales.

"Nos hemos tenido confianza porque creemos en el valor de estar juntos, en el valor de la unidad y porque queremos ser todavía más influyentes", ha asegurado Abad, que ha tildado "inaceptables" las insinuaciones que apuntan a un acuerdo para tener más fuerza en el recuento de empresas que ha anunciado el Departamento de Trabajo.

Preguntado sobre el estado de la disputa con Pimec, Sánchez Llibre se ha mostrado abierto a seguir negociando con la entidad presidida por Josep González y ha asegurado estar "convencido" de que se resolverá el conflicto.

Con todo, Foment seguirá adelante con los recursos contra la orden de la Generalitat de establecer un criterio basado en el número de empresas inscrito en cada organización, y sigue planteándose no presentarse al recuento por la representatividad si no se hace bajo criterios que incluyan aspectos como la facturación, el número de trabajadores, el volumen de exportaciones e importaciones o la capacidad de generar empleo.