El déficit en infraestructuras en Catalunya se evidencia cada vez más. Desde la patronal Foment del Treball tildan esta falta de inversión por parte del Estado de "vergonzosa". Según los datos de la patronal, el déficit acumulado de los últimos diez años ya ha llegado a los 27.970 millones de euros.

"Estamos muy decepcionados", asegura el presidente de la Cámara de Contratistas y vicepresidente de Foment, Joaquim Llansó. Al mismo tiempo, asevera que "esta falta de inversión pública se está cronificando y provoca que como país tengamos menos actividad económica ahora y en el futuro", traduciéndose en una "pérdida de competitividad".

El presidente de Foment, Josep Sánchez Llibre, ha explicado: "Desde Foment reclamamos un plan específico y un pacto estratégico de infraestructuras para todas las administraciones". Al mismo tiempo, "es cierto y evidente que hay unas cuantas infraestructuras licitadas que no se han llegado a hacer y reclamamos al Estado y a la Generalitat un impulso financiero extraordinario de 10.000 millones de euros para poder acabar estas obras que son estratégicas", a razón de 2.000 millones en 5 años (2019-2023). Además, la patronal reclama un extra de 5.000 millones de euros recurrentes cada año, lo que supondría el 2,2% del PIB catalán.

Además, para Llansó, "el problema de la competitividad no es hoy, es preguntarse qué pasará de aquí 5 o 10 años". Así, se pregunta: "¿Cómo sería nuestro PIB si desde el año 92 hubiéramos tenido el corredor mediterráneo?". En este sentido, Sánchez Llibre explica que "hay obras que ya tendrían que estar hechas y es decepcionante que no se hayan cumplido las expectativas".

"Probablemente, si estas obras se hubieran hecho cuando se tenían que hacer, habría habido más inversiones y más crecimiento, pero son intangibles y ahora no lo podemos comprobar. Lo que está pasando es una auténtica vergüenza y hay que cambiarlo. Sabemos que no será fácil y menos en un contexto en que las administraciones tienen los presupuestos prorrogados, pero nosotros apostamos por eso y es nuestra hoja de ruta", asevera el presidente de Foment.

¿Dónde está este dinero?

¿Dónde está el dinero? "Yo también me lo pregunto", dice Llansó. El caso es que estas obras que se reclaman ya estuvieron licitadas en su momento, "y para licitarlas había que haber hecho un presupuesto con el dinero" que hacía falta. El problema, según la patronal, es que gran parte de las obras licitadas no se han acabado, se han dejado a medias o no se han ni empezado. Se trata de algunas de las infraestructuras más estratégicas para Catalunya, como el corredor mediterráneo, Rodalies, la B-40 entre Abrera y Terrassa y la ampliación y finalización de la L-9 del metro, entre otras.

"Buscar el dinero no es trabajo nuestro", asevera, "pero lo que está claro es que se puede hacer mucho más de lo que se está haciendo". Además, desde Foment afirman: "Siempre hemos dicho que intentaríamos buscar la complicidad entre las administraciones, y eso es lo que queremos".

Por último, la patronal alerta de que de la lista de 100 infraestructuras más necesarias para Catalunya que se clasificaron en el último informe, "sólo hemos podido eliminar 4 y hemos añadido 7", de manera que la lista final queda en 103 infraestructuras primordiales.