Trabajadores de Nissan se han manifestado este jueves por la tarde ante la residencia de Frank Torres en Sant Cugat del Vallès. Torres es el directivo que tiene que pilotar el cierre de las plantas que la multinacional japonesa tiene en Barcelona. La manifestación tenía la voluntad de dejarle claro que el único diálogo que están dispuestos a aceptar es lo que sirva para negociar un futuro para las plantas.

Horas antes Torres había pedido a los sindicatos diálogo para buscar la solución "menos traumática". También les ha advertido que "cualquier amenaza de no querer colaborar" irá "en contra de todos", cinco días antes de empezar el proceso de consultas por el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectará a 3.000 personas.

En un encuentro virtual, el encargado de desmantelar las fábricas catalanas ha pedido colaboración al Gobierno y a la Moncloa para encarar el proceso y ha reiterado que el cierre es la única salida "viable" después de analizar "todas las opciones posibles".