No corren buenos tiempos para los recién graduados y más vale tener la agenda de contactos muy a mano. En el cuarto trimestre del 2015, la Encuesta de Población Activa (EPA) registró un 46,2% de paro entre los menores de 25 años en España, por lo que no es de extrañar que un 48% de los titulados universitarios no dude en recurrir a sus contactos personales para tratar de encontrar trabajo.

Más allá de debates meritocráticos, los contactos personales resultan la vía más efectiva para emplearse y así lo demuestra la evidencia empírica con ocho de cada diez encuestados que acaban trabajando tras acudir a alguno de sus conocidos, según sale reflejado en las 13.000 respuestas de la promoción 2009-2010 recogidas entre junio y julio de 2015 por el primer Barómetro de Empleabilidad y Empleo de los universitarios de Crue Universidades Españolas y la Cátedra Unesco de Gestión Política Universitaria, con la colaboración de Obra Social "la Caixa".

Otros recursos y métodos

Por otro lado, también hay un 46% que utilizan portales de empleo, un 45% que se ofrecen directamente a las empresas y un 31% que confía menos en los servicios públicos de empleo. No es momento para menospreciar ningún recurso ni tampoco ningún método.

A la hora de buscar su último empleo, un 29% de los encuestados consultaron también webs corporativas, mientras que un 22% utilizó las redes sociales y un 21% acudió a los servicios universitarios de empleo. También hubo un 17% que se decantó por empresas de trabajo temporal, un 15% que recurrió a un proceso de selección de personal, mientras que un 15% respondió a anuncios de prensa, un 12% recabó información de colegios profesionales y un 5% optó por los sindicatos y organizaciones similares.

Porcentajes distintos con un mismo objetivo: encontrar trabajo en tiempos difíciles.

Conjurar universidad y empleo

La opinión generalizada de los titulados señala que la universidad aporta poca información para encontrar empleo en sus más distintas facetas: elaborar un plan de búsqueda, mejorar un currículum o afrontar un proceso de selección, más concretamente, una entrevista de trabajo.

En ese mismo sentido, el director de la Cátedra Unesco de Gestión y Política Universitaria, Francisco Michavila, ha asegurado en declaraciones a El Nacional que "hay que conjurar la universidad con el mundo laboral y seguir avanzando en las competencias para formar empleo". Formación universitaria y realidad laboral, un poco más cerca.