La automovilística Seat, que ya anunció el pasado viernes que a partir de hoy detendría su producción en la plata de Martorell por el coronavirus, ha presentado hoy delante de los sindicatos un ERE temporal (ERTE) a la totalidad de la plantilla, unos 14.800 trabajadores. La empresa asegura que se trata de una medida "de fuerza mayor" y que, aunque se aplicará a todos sus 14.800 trabajadores, después se irá agachando en función de las necesidades.

Tras reunirse con los sindicatos esta tarde, la empresa asegura que ofrece la posibilidad de hacer teletrabajo, da permiso retribuido a las embarazadas y garantiza el 100% del salario a los trabajadores confinados y en cuarentena, y avisa, al mismo tiempo, de que "no se ha registrado ningún caso de coronavirus dentro de la empresa". De esta manera, la empresa explica que, aunque el expediente de regulación se aplica a toda la plantilla, "sólo afectará a los que tengan que detener su actividad por el coronavirus".

Características del ERTE

El periodo de vigencia del ERTE se alargará mientras dure la causa fuerza mayor, es decir, "hasta que permanezcan las circunstancias que no permiten desarrollar la actividad laboral con normalidad". En este periodo, además, la empresa explica que podría destinarse algunos días a formación del personal, y que el Comité Ejecutivo de Seat ha acordado "complementar la prestación de desempleo del ERTE hasta el 80% del sueldo de cada empleado, e incluir el complemento de previsión". Asimismo, la dirección de la empresa ha acordado que podrán hacer teletrabajo todos los empleados que no deban interrumpir su actividad laboral y sus puestos de trabajo les permita desarrollar su actividad a distancia, en línea con la recomendación de la Administración.

Por otra parte, la compañía ha dado permiso retribuido a todas las trabajadoras embarazadas, que cobrarán el 100% de su salario. También ha garantizado el 100% del salario para todos los empleados que tengan que hacer cuarentena por haber estado en contacto con personas con resultado positivo y a aquellos que se encuentren confinados en áreas delimitadas por la Administración, como es el caso de Igualada (Barcelona). Estas personas no se verán afectadas por el ERTE hasta la finalización de la cuarentena o el confinamiento.