La Generalitat se plantea aprobar una prestación de desempleo provisional para los millares de trabajadores afectados por Expedientes de Regulación de Empleo Temporal (ERTE) que están a la espera de cobrar el paro y poder garantizarles así unos ingresos mínimos mientras esperan.

El conseller de Trabajo, Chakir el Homrani, ha explicado hoy, en una entrevista en TV3, que su departamento está estudiando esta medida después de constatar que una gran parte de los trabajadores inmersos en un ERTE no están cobrando el paro a causa de las dificultades de tramitación en el SEPE, el servicio estatal de ocupación.

"Analizamos que, si se alarga esta situación, podamos dar alguna prestación finalista, pero antes tenemos que conocer las cifras en que nos movemos. Hace falta transparencia en los datos y saber cuántos de los 680.000 afectados por ERTES en Catalunya ya cobran y cuántos no", ha indicado.

El conseller ha insistido en la necesidad de dar una respuesta especialmente a las personas más vulnerables durante el tiempo en que han dejado de cobrar de su empresa y no están todavía percibiendo ninguna prestación de desempleo a causa del "cuello de botella" en la gestión de las prestaciones en qué se encuentra el SEPE.

En esta línea, ha asegurado que muchos de los trabajadores que están en el paro temporalmente cobraron su última nómina en marzo, que ya fue parcial, y todavía no han contado con ningún otro ingreso desde entonces.

Por otra parte, la consellera de Empresa y Conocimiento, Àngels Chacón, en declaraciones también en TV3, ha alertado el peligro que los actuales ERTES de fuerza mayor acaben derivando en ERTES por causas productivas y, después, en despidos colectivos definitivos.

"Los ERTES son los síntomas que las empresas cierran. Ahora son por fuerza mayor, pero de aquí unos días serán por causas de producción y después expedientes de regulación de empleo definitivos", ha asegurado.

Chacón ha calificado de "insostenible" la situación que atraviesan las pymes y los autónomos y ha vuelto a reclamar al Gobierno que vaya más allá en las medidas de ayuda a estos colectivos, con la suspensión del pago de los tributos y otras obligaciones financieras.

Así, ha reclamado que los 690.000 autónomos de Catalunya puedan dejar de pagar sus cuotas en la Seguridad Social, que equivalen a 186 millones de euros en el mes, al tiempo que ha instado a las entidades financieras a actuar de manera "ética" ante los "abusos" detectados en la aplicación de los intereses de los créditos en las empresas.