Los seis grandes bancos españoles han aprovechado la primera mitad del año para mejorar notablemente su balance y reducir su tasa de morosidad, pero han sido principalmente Sabadell y Bankia los que lo han hecho de forma más acusada. En el caso de Bankia, a cierre de junio la morosidad se ha situado en un 9,8%, un punto porcentual menos que a cierre del 2015, hecho que supone el mayor recorte en la gran banca, muy próxima a la del Banco Sabadell, que del 7,79% de diciembre ha bajado hasta el 6,83% en los últimos compases del primer semestre del 2016.

A continuación, con caídas superiores al medio punto, lo que se traduce en una mejora de la calidad crediticia, figuran CaixaBank y Banco Popular, cuya morosidad ha descendido de enero a junio de este año 0,58 y 0,54 puntos porcentuales, hasta acabar en un 7,3% y un 12,32%, respectivamente. En el caso de los dos gigantes del sistema financiero español, la morosidad de BBVA se ha reducido 0,3 puntos porcentuales en el primer semestre del año, hasta el 5,1%, mientras que la del Banco Santander a duras penas ha bajado a un 0,07, hasta 4,29%.

Volumen de créditos dudosos

Por otra parte, si se tiene en cuenta el volumen de créditos dudosos de cada entidad, muy atado al tamaño de cada banco, el mejor dato semestral en términos absolutos se lo anota el Sabadell, con un recorte de 1.749 millones en el saldo de morosos, hasta 10.812 millones. En segundo lugar, se encuentra Bankia que ha tenido una caída de 1.244 millones desde el inicio del 2016, hasta los 11.751 millones, y cerrado el podio, está el BBVA con una bajada de 1.162 millones en el mismo periodo para acabar el semestre con un saldo de morosos de 24.834 millones.

El cuarto lugar le corresponde a CaixaBank, con un descenso de 1.003 millones en el saldo de morosos, superior a los 913 millones de Banco Popular, con lo cual el volumen de impagados de estas dos entidades se queda en 16.097 y 17.426 millones, respectivamente. La caída más modesta en los créditos morosos de la gran banca corresponde al Banco Santander, con un descenso de 803 millones, hasta los 36.291 millones que ha acumulado a cierre del primer semestre del 2016.

Más cobertura

Además, en algunos casos la bajada de la morosidad ha ido acompañada de una mejora de las provisiones sobre los créditos dudosos, lo que ha hecho que las tasas de cobertura de Bankia y Sabadell hayan aumentado en 0,8 y 0,44 puntos porcentuales en los seis primeros meses del año, hasta el 60,8% y el 54,08%, respectivamente. En el BBVA, la tasa de cobertura se ha mantenido sin cambios, en el 74%, mientras que en el Banco Santander se ha reducido 0,6 puntos, es decir, ha empeorado ligeramente, hasta el 72,5% de finales de junio.

Un deterioro mayor del nivel de cobertura de los préstamos morosos se ha producido en el Banco Popular y en CaixaBank, con caídas de 3,45 y tres puntos porcentuales, hasta un 39,05% y un 53%, respectivamente.

Al tratarse de la gran banca no se destacan los datos de Bankinter, que con su entrada en Portugal ha seguido una trayectoria diferente y ha aumentado tanto su morosidad, 0,12 puntos porcentuales, hasta 4,25%, como el saldo de morosos, que ha crecido en 343 millones para acabar el semestre en los 2.382 millones.