La plataforma Airbnb está implementando un nuevo protocolo de verificación de direcciones postales para los nuevos anuncios en Barcelona con tal de ayudar a combatir las prácticas irregulares por parte de algunos anfitriones. Así, las personas que actúan de anfitriones a través de esta plataforma de alojamientos turísticos deberán proporcionar una dirección postal verificada antes de poder publicar un nuevo anuncio, y si no lo hacen no podrán activarlo. La plataforma afirma que está lanzando medidas como ésta para buscar "incrementar la seguridad y la confianza en la plataforma".
Esto ocurre poco después de que el gobierno municipal de Barcelona echara el freno a Airbnb al suspender preventivamente la concesión de licencias para el alquiler de habitaciones turísticas en pisos. En un comunicado, Airbnb ha asegurado que este nuevo protocolo, que se está introduciendo desde finales de agosto, evita que se creen nuevos anuncios con direcciones incompletas o que no coinciden con las calles de la ciudad.
El intercambio de información entre el Ayuntamiento de Barcelona y Airbnb ha facilitado desde 2018 que se hayan identificado y eliminado más de 5.000 anuncios que el consistorio asegura que no cumplen con la normativa, según la plataforma de alquiler.
Suspensión de las licencias de alquiler de habitaciones en pisos particulares
El gobierno municipal de Barcelona suspendió preventivamente la concesión de licencias para el alquiler de habitaciones turísticas en pisos el pasado agosto. La teniente de alcalde de Ecología, Urbanismo, Infraestructuras y Movilidad del Ayuntamiento de Barcelona, Janet Sanz, denunció que el decreto del gobierno catalán que legaliza el alquiler de habitaciones turísticas se ha hecho "al dictado de plataformas digitales, al dictado de Airbnb, sin tener en cuenta los riesgos" que las actividades que se incorporan tienen para la ciudad y para la garantía del derecho a la vivienda.
Sanz explicó que, con esta suspensión preventiva, el Ayuntamiento se "cura en salud" y "da una oportunidad a la Generalitat a rectificar el reglamento" para que sea más restrictivo con la nueva actividad, incorpore la reflexión desde el territorio y ponga al alcance de los ayuntamientos instrumentos jurídicos y los recursos para su inspección y control".
También indicó que el decreto del Govern trata una regulación genérica que "pasa la pelota" a los ayuntamientos, que son los que deberán ver cómo controlan la actividad, con problemas como el que supone que los inspectores accedan a una vivienda privada. Por su parte, Airbnb afirmó que el nuevo decreto reglamentario es “un paso adelante” para los que comparten casa en Cataluña y en Barcelona.
Según sostiene la compañía estadounidense dedicada a la comercialización de viviendas de uso turístico, durante estos últimos años "Airbnb ha trabajado con las autoridades y los municipios catalanes en un marco regulatorio que pudiera ayudar a los residentes a alojar viajeros en su hogar de manera responsable, diversificando el turismo, protegiendo la vivienda, siguiendo la normativa vigente y pagando sus impuestos".