Carlos Sainz sigue sin encontrar la felicidad en su aventura por Williams, donde las cosas no están funcionando como se esperaba. Ya se han celebrado varios Grandes Premios, pero los resultados no terminan de llegar, y muchas de las promesas que le hicieron en su momento, cuando decidió firmar por ellos, no se han cumplido. Y cada vez parece tener más claro que le engañaron, y que no tomó una buena decisión a la hora de elegir su nueva aventura.
Porque cuando en Ferrari le comunicaron que habían fichado a Lewis Hamilton, y le obligaron a buscarse un nuevo equipo, el piloto madrileño esperaba poder aterrizar en otra escudería que le garantizara pelear por podios. Y se atrevió a rechazar a Alpine, que le presentó una oferta muy interesante, para apostar por el equipo británico, que le garantizaba un proyecto realmente ambicioso. Sin embargo, no se ha acabado de adaptar como esperaba.

No tuvo un inicio fácil, y ahora que ya parece comprender mejor el coche, no le ha acompañado la suerte. Así se pudo ver durante el GP de la Emilia-Romaña, en el cual logró clasificarse sexto para la salida, pero se tuvo que conformar con un octavo puesto, después de que la estrategia que diseñó el equipo durante la carrera no fuera la más acertada. Y de nuevo, quedó por detrás de su compañero, Alexander Albon, que fue quinto.
El tailandés tiene una cómoda ventaja de puntos en la clasificación general de pilotos respecto a Sainz, quien comienza a sospechar que ni siquiera es la principal referencia dentro de Williams, y que prefieren apostar por el asiático. Y esto ha comenzado a desquiciar al hijo del legendario Carlos Sainz, que cada vez está más harto, y se ha llegado a cuestionar su futuro dentro de la escudería, hasta el punto de meditar un posible cambio de aires.

Si tiene la oportunidad de recalar en otro equipo que le resulte más atractivo y donde pueda tener mejores resultados, no lo dudará y tratará de cambiar de aires.
Sainz no se cierra ninguna puerta
Sainz no se atreve a cerrar ninguna puerta, y está muy atento a todo lo que sucede en el resto de fábricas. Y una opción muy comentada es su posible aterrizaje en Red Bull, si Max Verstappen acaba saliendo, o incluso en Aston Martin.
Pero todavía quedan muchos meses de temporada, y pueden cambiar muchas cosas en Williams.