La temporada 2025-2026 de la NBA ha arrancado con más interrogantes que certezas para Los Ángeles Lakers. Pese a la llegada del esloveno Luka Doncic el pasado mes de febrero, quien ha demostrado con exhibiciones anotadoras (43 y 49 puntos en los primeros dos encuentros) que su candidatura al MVP es más sólida que nunca, una baja inesperada y un problema crónico de ciática en LeBron James han sacudido el ecosistema de los oro y púrpura. La ausencia de sus dos máximas estrellas dejó un vacío de liderazgo y producción que, para sorpresa de muchos, fue llenado por un jugador que nadie anticipaba: Austin Reaves, quien ofreció una actuación memorable en el Golden 1 Center de Sacramento, acaparando la atención de toda la liga.
El escolta, conocido hasta ahora como un tercer generador en ataque, se vistió de superestrella para firmar la mejor noche de su carrera. Sus 51 puntos, 10 rebotes y 9 asistencias fueron el motor de una crucial victoria (127-120) ante los Sacramento Kings, un rival directo en el siempre competitivo Oeste. Reaves no solo alcanzó una cifra anotadora personal nunca vista, sino que coqueteó con el triple-doble, demostrando una madurez ofensiva y una capacidad de liderazgo que reabre un debate que ya burbujeaba en el seno de la franquicia angelina: ¿Puede Austin Reaves coexistir a largo plazo con Luka Doncic?
¿Son Doncic y Reaves tácticamente incompatibles?
El rendimiento de Reaves en ese partido, con una efectividad asombrosa (12 de 22 en tiros de campo, 6 triples y un casi perfecto 21 de 22 desde la línea de libres), no es un espejismo. Es la confirmación de que sus recursos van mucho más allá de ser un simple complemento. En los primeros juegos, incluso con Doncic en cancha, se le había visto asumir un papel de segunda espada, un indicio de la confianza del staff técnico. Sin embargo, el estelar arranque de Luka, con 92 puntos en dos juegos, había eclipsado cualquier otra narrativa. Ahora, con el esloveno fuera por una semana, y LeBron lidiando con su físico, Reaves ha dado un golpe en la mesa.
La irrupción de Reaves en este nivel llega en el momento más inoportuno, o más oportuno, según se mire, para la directiva de los Lakers. Antes de esta exhibición, el debate ya se centraba en su encaje táctico. Reaves es un jugador que optimiza su ataque amasando el balón, buscando la penetración y generando para sí mismo o para sus compañeros. Esta descripción es, curiosamente, una réplica casi exacta del estilo de juego de Luka Doncic.
"Tiene que salir del equipo": La afición Laker presiona por el traspaso de Reaves
El destino de Austin Reaves en Los Ángeles Lakers se ha convertido en un complejo dilema para la directiva, ya que su valor de mercado se disparó tras sus recientes exhibiciones. Se dice que Reeves pedirá un contrato de jugador franquicia, una cifra que comprometería gravemente la flexibilidad salarial del equipo, dadas las grandes sumas ya destinadas a Luka Doncic y la posible continuidad de LeBron James.
En medio de esta encrucijada financiera y deportiva, los aficionados se dividen. Muchos claman que es el momento de tradearlo por un perfil más complementario a Luka. No se trata de desprecio a su talento; todo lo contrario. La frase que resuena en las redes es clara y contundente: "Tiene que salir del equipo", pero no por mal jugador, sino para que consiga un equipo donde sea la primera estrella y los Lakers adquieran una pieza que se acople mejor al liderazgo indiscutible de Doncic.