Semanas muy movidas para Sandro Rosell. Después de cumplir un año en prisión preventiva por un caso de blanqueo de capitales que mantiene a Rosell en la prisión, también estuvo el caso Abidal con un comunicado del mismo expresidente del Barça. Y ahora se le acusa de beneficios personales con el patrocinio de Catar con el Barça.

El diario El Confidencial explica que un informe de la Guardia Civil concluye que Sandro Rosell sacó provecho económico personal del acuerdo entre el Baça y Qatar Sports Inverstments (QSI) en el año 2010 para que patrocinara por primera vez en la historia la camiseta del Barça. Los investigadores explican como en las cláusulas de los contratos había beneficios para un proyecto educativo con Aspire (academia para el desarrollo de deportistas cataríes), una empresa que tenía como principal cliente Bonus Sports Marketing (consultoría fundada por Rosell).

Las informaciones salidas explican cómo el 70% de los ingresos de BSM tenían su fuente en Aspire. La publicidad del Barça primero fue Qatar Foundation, que pasó a ser Qatar Airways: dos nombres asociados directamente a QSI. Entre las cláusulas se explica que estaba la obligatoriedad contractual de los futbolistas del primer equipo a viajar a Catar para hacer actos promocionales en acabar la temporada, presencia del juvenil del Barça para entrenar a la academia Aspire, o la posibilidad de los equipos Aspire a venir a Barcelona a entrenar con todos los gastos pagados.

A pesar de todo, antes de firmar el contrato, el mismo Rosell ya anunció que se había desvinculado de BSM para no incurrir en un patrocinio con beneficios personales. Pero las investigaciones apuntan que, como ya se ha ido sosteniendo en los últimos años, y más después de la operación Rimet, Shahe Ohanessian, amigo de Rosell, era el testaferro de la operación. Y había intereses personales para Sandro Rosell.