La vida de Marc Roca ha cambiado de manera radical en cuestión de días. Porque muchos daban por hecho que acabaría abandonando el Bayern de Múnich más pronto que tarde, viendo que no había jugado nada esta temporada. Sin embargo, gracias a las bajas que ha habido en el equipo bávaro, como la de Joshua Kimmich, ha tenido una oportunidad, que ha aprovechado. Y, como su entrenador, Julian Nagelsmann, ha reconocido públicamente, se había equivocado con él.
Ha demostrado tener nivel y calidad más que de sobra para poder ayudar al equipo, y se espera que tenga un rol importante, al menos, en las rotaciones. Eso quiere decir que ha paralizado por completo su posible salida, y se lo quedará, como mínimo, hasta final de temporada. El futbolista también estaba decidido a cambiar de aires, pero, viendo que tendrá más minutos en los próximos meses, ha ordenado a su agente que le deje de buscar destino.
Marc Roca/ Europa Press
Una noticia que ha caído como un jarro de agua fría en el Barça. En especial, a Xavi Hernández, que era el gran impulsor de la operación, y que había sido la persona que había solicitado la incorporación del internacional español en categorías inferiores. Le veía como un refuerzo ideal para el centro del campo, y como un sustituto perfecto para Sergio Busquets, que ya está en la recta final de su carrera. Creía que encajaba perfectamente en su sistema.
Además, era un fichaje accesible, viendo que desde el Allianz Arena le querían echar, al no tener espacio. Podía llegar en calidad de cedido, o mediante un traspaso, de una cantidad no demasiado elevada, teniendo en cuenta que solo pagaron nueve millones de euros por él. Pero ahora, todo se ha desmontado, y en el club azulgrana tendrán que comenzar a buscar otra alternativa. Roca era la que más gustaba de todas.
Sergio Busquets/ EFE
Marc no se había pronunciado en público, aunque sí había deslizado que no estaba satisfecho con su situación en el Bayern. Sin embargo, no se había dejado querer por el Barça, y no tenía previsto marcharse al Camp Nou bajo ningún concepto.
No quiere traicionar al Espanyol
En caso de que hubieran llegado a un acuerdo entre clubes, todo se habría desmoronado por el deseo del mediocentro de 25 años. Se crió en la cantera del Espanyol, llegando hasta el primer equipo, y siendo uno de los grandes ídolos de la afición. No quería traicionar al club que se lo dio todo, y del que es aficionado, yéndose al eterno rival.
En cambio, sí que le resultaba muy seductora la posibilidad de aterrizar en el Real Madrid o en el Atlético de Madrid, otros de sus pretendientes.
De momento, se quedará en la Bundesliga.