Lo que parecía un fichaje casi cerrado para el Athletic Club se puede convertir en una de las novelas más entretenidas del verano en el fútbol vasco. Aimar Oroz, el talentoso mediapunta de Osasuna, se ha metido sin querer en el centro de una disputa entre los dos grandes vascos: el equipo de Valverde y la Real Sociedad.
Durante semanas, en Bilbao estaban bastante confiados. Veían a Oroz como una pieza clave para reforzar el proyecto rojiblanco. Tiene ese estilo dinámico y trabajador que encaja con la filosofía del club, y además es joven, con proyección y mucha clase.

Batalla entre Athletic Club y Real Sociedad por una perla de Osasuna
Pero entonces apareció la Real. Sergio Francisco ha dado luz verde a su fichaje. En Donosti no solo quieren fichar talento; también motiva quitarle una estrella al Athletic. La aparición de la Real ha sido tan contundente que ha dejado temblando la hoja de ruta de Valverde. Ahora todo está en el aire.
Por su parte, en Pamplona ya no hacen mucho esfuerzo por disimular. Saben que Oroz se va, es cuestión de tiempo. Porque si se va, no van a regalarlo. Dispuestos a escuchar ofertas, lo ven como una opción para meter dinero fresco en las arcas. El crack tiene contrato, ha rendido bien, y hay más de un club preguntando por él.
Oroz tendrá la última palabra
El jugador, mientras tanto, va a lo suyo. Entrena, juega y mantiene el silencio. No quiere líos ni titulares forzados. Pero su entorno sí se está moviendo. Están analizando las propuestas deportivas, no solo los números. Y aunque su futuro está lejos de El Sadar, aún no está claro si el siguiente destino tendrá tintes rojiblancos o txuri-urdines. En cualquier caso, él tendrá la última palabra.
