El Barça siempre quiere más. Después de derrotar al Real Madrid en las semifinales de la Copa del Rey (0-3) hace sólo tres días, los futbolistas de Ernesto Valverde vuelven al Santiago Bernabéu (20.45h / Movistar Partidazo) con una misión distinta pero igual de estimulante: sentenciar la Liga. Para conseguirlo, el conjunto blaugrana tendrá que jugar mejor que en la Copa o, como mínimo, deberá volver a ser increíblemente contundente.
Condemnar el Madrid, la prioridad
Se ha llevado un 0 a 3 en casa, ha quedado eliminado de la Copa del Rey y tiene muy pocas opciones en la Liga. El Real Madrid de Santiago Solari se hunde y, en medio del vendaval, sólo Vinícius -un chico de 18 años- está manteniendo la compostura. Delante de un escenario así, el Barça debería rematar al eterno rival para dilapidar sus opciones de conseguir el título y, de paso, magnificar el malestar que hace semanas que cierne sobre el Bernabéu.
La única realidad inmutable es que el escenario no intimidará a los hombres de Valverde. En las últimas diez temporadas, el Barça se ha especializado al protagonizar goleadas en el feudo blanco y todo apunta que Messi y comapañía querrán volver hacer sangre. 2-6 en la 2008/09, 1-3 en la 11/12, 3-4 en la 13/14, 0-4 en la 15/16, 2-3 en la 16/17 y 0-3 el curso pasado son los últimos resultados de un equipo que ha convertido el césped del Bernabéu en un marco plácido.
Arthur, el hombre clave
En la vuelta de semifinales de la Copa el Barça ganó por tres goles de diferencia pero lo cierto es que no dominó el partido. Arthur Melo, el hombre clave para controlar la medular blaugrana, llegó en condiciones discutibles después de su lesión y sólo pudo jugar los últimos 5 minutos del encuentro. Tres días después, el brasileño parece que está preparado y apunta a titular en la posición que el miércoles ocupó Sergi Roberto. Aun así, Valverde -poco amigo de las sorpresas- podría alinear el mismo once que en la Copa.
Por otra parte, Solari se plantea cuál es la mejor solución para no repetir ridículo. El técnico argentino aseguró en rueda de prensa que su equipo "había hecho muchas cosas bien" en la Copa, pero tendrá que mover alguna pieza si no quiere parecer un entrenador inoperante. Con casi todos los efectivos disponibles (sólo Nacho está sancionado) y una eliminatoria de Champions abierta en el horizonte, no es descartable que Solari apueste por varios suplentes.
Los 11 de El Nacional
