El Espanyol ha ganado al Ludogorets por la mínima gracias al gol de Campuzano (0-1). Los blanquiazules son los líderes del grupo H de la Europa League y suman ya 24 partidos invictos en Europa, una cifra espectacular.
Las sensaciones que dejó el Espanyol en el debut de Machín fueron buenas, pero al final lo que importa son los resultados. Los blanquiazules perdieron por la mínima contra el Villarreal y la situación en la Liga es preocupante. Penúltimos en la clasificación con sólo cinco puntos y la dinámica tiene que cambiar como sea. Ahora bien, en Europa es diferente.
9 cambios en la alineación
El grupo con el cual está encuadrado el Espanyol es para estar en la siguiente fase sin muchos problemas y de hecho tienen todos los números para estar. Con los 7 puntos, los catalanes amplían la distancia con sus rivales y ya lideran el grupo. Pablo Machín está conociendo a su plantilla y este jueves ha llegado a hacer un total de 9 cambios en la alineación con respecto al partido contra el Villarreal.
Una de las principales novedades en el once ha sido el retorno de Óscar Melendo. Hacía más de un mes que no jugaba ningún minuto y el entrenador de Soria ha querido ponerlo a prueba. La última aparición del jugador de la cantera fue contra el Ferencváros y sorprendió que un futbolista como él, que marca las diferencias, desapareciera.
Mahcín ha seguido con el sistema de tres centrales y dos carrileros y parece que los blanquiazules se están adaptando a este estilo. No obstante, provoca que el juego sea lento y aburrido. Campuzano ha aprovechado un error del Ludogorets en la salida de pelota y ha marcado el único gol del partido.
No hay '9'
El delantero ha realizado una gran actuación, pero ahora mismo los titulares serían otros. Sin embargo, el Espanyol sigue teniendo un problema y es que no hay ningún '9' como Gerard Moreno o Borja Iglesias. Faltan más goles y también falta que los pericos generen más peligro en el área rival.
La entidad catalana no ha tenido muchas complicaciones y es que los búlgaros han estado muy imprecisos y muy flojos. Diego López ha sido un espectador más y no ha tenido que intervenir. El Espanyol ha controlado las facetas de juego y la segunda parte ha sido un trámite en el que han pasado muy pocas cosas.
Los de Machín vuelven a casa con tres puntos más y ahora todos los esfuerzos se tienen que centrar en el compromiso contra el Levante de la Liga.