El Real Madrid atraviesa uno de los momentos más complicados de la temporada. Tras un inicio prometedor, la dinámica de Xabi Alonso se ha visto empañada por una serie de resultados negativos. Cuatro tropiezos en los últimos cinco encuentros han encendido las alarmas, mientras que los rumores sobre su relación con jugadores clave comienzan a ocupar titulares. Las imágenes del campo y las declaraciones de ciertos internos del vestuario sugieren que el ambiente sigue siendo tenso.
Contra Olympiacos y Girona, el equipo mostró un cambio de actitud que fue apreciable, pero insuficiente. La falta de cohesión y la irregularidad en el rendimiento colectivo dejaron claro que los problemas de fondo persisten. La pérdida del liderato frente al Barcelona evidencia que el equipo todavía no ha encontrado su mejor versión bajo la dirección de Xabi Alonso.
La tensión en el vestuario del Real Madrid es un secreto a voces
Fuentes del club citadas por The Athletic apuntan a una clara fractura interna. “Algunos jugadores no están convencidos del método de Xabi Alonso. Otros defienden al técnico, pero la mayoría observa con desconfianza ciertas decisiones”, explican. La división interna en el Real Madrid se percibe en cada entrenamiento y en la ejecución táctica sobre el campo.
La crítica más dura llega desde dentro. Algunos futbolistas señalan que el equipo está desorientado, con jugadas previsibles y carencia de fluidez ofensiva. Uno de ellos describió la situación con palabras duras: “Estamos jugando muy mal”. Otro fue más contundente respecto al último empate contra el Girona: “Fue un desastre”. Comentarios que reflejan la frustración y la presión que vive la plantilla.
Calma tensa en el seno del Real Madrid
La directiva, de momento, no se pronuncia, en busca de mantener la sensación de cierta confianza en Alonso. Saben que alimentar la posibilidad de un cambio de entrenador ahora podría desestabilizar aún más la temporada. Sin embargo, reconocen que los resultados y la imagen del equipo deben mejorar rápidamente para evitar un efecto dominó que afecte la clasificación y la moral del vestuario.
Los próximos encuentros serán cruciales. El Madrid se enfrenta primero al Athletic Club en San Mamés y luego recibirá al Celta en el Santiago Bernabéu. Pero el partido que marcará la verdadera prueba será la visita del Manchester City de Pep Guardiola. El catalán conoce bien a Xabi Alonso y su estilo, y puede convertirse en la medida perfecta para evaluar si el equipo está preparado para retomar su rumbo o si la tensión interna seguirá creciendo.