El Real Madrid atraviesa un buen momento con Xabi Alonso al mando. Aunque el juego no sea brillante, el equipo gana y lidera. En el vestuario, sin embargo, hay un caso que preocupa. Uno que, pese a su talento, no encuentra espacio. Su nombre: Endrick.
El joven delantero brasileño llegó como una de las grandes promesas del fútbol mundial. Florentino Pérez pagó 72 millones de euros al Palmeiras, una cifra récord para un jugador menor de 20 años. El proyecto era formar a una nueva estrella. Pero la realidad ha sido muy distinta. Desde que comenzó la temporada, Endrick no ha disputado ni un minuto oficial con el primer equipo.
Xabi Alonso no confía en Endrick
Xabi Alonso considera que el joven necesita más tiempo, más madurez y ritmo competitivo. En el Real Madrid actual, lleno de estrellas y con una delantera de nivel mundial, no hay espacio para pruebas. En su lugar, Alonso ha apostado por Gonzalo García, un canterano al que ve más preparado para asumir el rol de suplente de Mbappé.
No todo se basa en si está preparado o no. Un episodio ocurrido en el último partido de liga conta el Getafe terminó de cavar su tumba. El jugador, después de haber estado un rato calentando en la banda, tuvo una mala reacción al saber que tampoco tendría minutos. Dio una patada a una botella y no escondió su malestar. Un episodio que no hizo ninguna gracia a un Xabi Alonso que no soporta los egos.
El contraste es evidente. Mientras Gonzalo suma minutos y confianza, Endrick se hunde en el banquillo. Ni ante la Juventus ni en el Clásico tiene posibilidades de tener minutos. Y la situación está llegando al límite. “O se va, o lo van a echar”, deslizan desde en entorno madridista. La opinión de que lo mejor para el jugador es salir cedido aumenta cada día.
Endrick apunta a la rampa de salida en enero
El Real Madrid ya estudia esa posibilidad. En el mercado de enero de 2026, podría marcharse a otro club europeo. El objetivo es que sume minutos, gane experiencia y se adapte al ritmo del fútbol continental. Según fuentes cercanas al club, hay interés en España y en la Premier League, pero ninguna decisión está tomada aún. Lo que sí parece claro es que su futuro inmediato no está en el Bernabéu.
El propio Endrick tampoco se opone. Sabe que necesita jugar si quiere llegar en forma al Mundial de 2026 con Brasil. Quiere continuidad, goles y protagonismo. Permanecer en el banquillo no le ayuda. Aunque sigue siendo una de las joyas más prometedoras del fútbol brasileño, su desarrollo exige minutos y experiencia.