La salida de Ousmane Dembélé del FC Barcelona fue un hecho totalmente inesperado para el barcelonismo y, por lo cual, muy doloroso. Todavía había buena parte de la afición culé que no había perdonado al jugador después de su tira y afloja con el club del verano de 2022, pero, mayoritariamente, el francés era un futbolista muy valorado en can Barça por su capacidad en el campo y por lo que había demostrado ser capaz de hacer cuando no estaba lesionado.
No obstante, cuando mejor estaba, volvió a lesionarse, dejando al equipo blaugrana falto de su desequilibrio durante más de tres meses. El Barça lo esperó, pero, sin embargo, Dembélé decidió, no solo hacer las maletas meses más tarde, sino hacerlo activando la cláusula que tenía cuándo firmó su última renovación con Joan Laporta, marchándose al PSG por 50 millones y el Barça ingresando 35,4.
Dembélé tenía una oportunidad para hablar bien del Barça, pero tampoco
Así pues, el ex del Borussia Dortmund, después de 6 temporadas muy irregulares marcadas por las lesiones, hizo las maletas hacia el Paris Saint-Germain de la manera más irrespetuosa posible. No obstante, lejos de sentirse en deuda con su exclub o, al menos, tratar de hablar bien de su etapa, ha evitado hablar de él en la entrevista que concedió al medio francés téléfoot.
Concretamente, analizó el porqué decidió marcharse de la capital catalana para llegar a la francesa y habló de sus características como futbolista. En el FC Barcelona ya habían aterrizado mal las palabras del jugador al reconocer que cambió de equipo porque para él la confianza era muy importante y que en París, tanto Luis Enrique como Nasser Al-Khelaïfi le habían transmitido muy buenas sensaciones. Xavi Hernández siempre había sido su valedor y lo había defendido, pero tampoco. Así lo explicaba: "¿Por qué fiché por el PSG? Hablé con el entrenador y el presidente Al-Khelaïfi. Ellos me explicaron el proyecto y volver a jugar en Francia también me hacía ilusión. Todo está bien en el PSG, tenemos un gran entrenador y el discurso del 'presi' me gustó", concluyó.
Y para acabar colmarlo, en esta entrevista, Dembélé confirmaba que en el mejor equipo donde había estado es en el de la selección francesa, cuando, recordemos, en sus primeros años en Barcelona llegó a compartir vestuario con futbolistas legendarios como Sergio Busquets, Andrés Iniesta, Luis Suárez y, sobre todo, Leo Messi.
Dembélé, feliz en Francia
Y mientras Dembélé vuelva esta semana a concentrarse con su nuevo equipo después del parón de selecciones, el extremo está feliz en Francia, satisfecho de una decisión que, esta vez de manera definitiva y sin posible perdón, le hará ser una persona no grata en Barcelona por el resto de su vida. Ciertamente, razones no faltan.