El barcelonismo respira tranquilo. Este sábado, Leo Messi recibió una fuerte patada de Kalidou Koulibaly en la jugada del penalti que Luis Suárez convirtió en el tercer gol del Barça contra el Nápoles. Aunque la acción se tradujo en una diana blaugrana, la mirada de los culés se dirigió al '10', y es que durante unos minutos paseó cojeando por el césped del Camp Nou.
Pocas horas después, los seguidores pueden respirar tranquilos. Todo ha quedado en un susto. Este domingo, Messi ha sido examinado en la Ciudad Deportiva Joan Gamper, donde los médicos han constado que sólo tiene una fuerte contusión en el tobillo izquierdo. Así pues, el argentino podrá disputar sin ningún problema el partido de cuartos de final contra el Bayern de Munich que tendrá lugar el próximo viernes.
Leo Messi, en una acción del partido / EFE
El equipo blaugrana se ha entrenado esta mañana en una sesión de recuperación y ahora no volverá a pisar el césped de la Ciudad Deportiva hasta el martes que viene. El jueves 13 de agosto los de Quique Setién viajarán a Lisboa, donde se disputa la fase final de la competición. Aquí tienes el resumen del partido Barça - Bayern.
El equipo se instalará cerca de la plaza Marqués de Pombal, a pocos kilómetros de distancia del estadio Da Luz (escenario del partido contra el Bayern) y de José Alvalade, donde se jugaría una hipotética semifinal. Cada uno de los equipos clasificados (Barça, Bayern, Manchester City, Olympique de Lyon, PSG, Atalanta, Leipzig y Atlético de Madrid) se alojará en un hotel diferente.
En cualquier caso, Messi está preparado para afrontar el reto de la final a 8. Este sábado, después del partido, el argentino envió un mensaje alentador a los seguidores a través de Instagram. La gesta es difícil, pero con él en las filas culés todo es posible.