Barcelona es una ciudad de cultura, de grandes espectáculos y también donde se pueden ver los festivales del Barça y de Leo Messi. El Camp Nou ha vivido una nueva exhibición del astro argentino en el segundo partido oficial de la temporada en casa (8-2). Los blaugrana han demostrado contra el Huesca su voluntad de empezar generando miedo a sus rivales y de evitar las sorpresas. Y también quitándole el liderato al Real Madrid.

Un gol tempranero de los aragoneses ha puesto la primera nota de color de un partido lleno de matices, de atrevimiento y de un fútbol enamoradizo. Tanto el Barça como el Huesca no han tenido miedo de nada y han hecho disfrutar con un intercambio de golpes constante que sólo ha durado 90 minutos y lo que el VAR ha hecho alargar.

Sorpresa pasajera

Ernesto Valverde no ha querido sorpresas contra el Huesca, tampoco los futbolistas, y por eso se ha repetido de inicio nuevamente el once que se llevó los tres puntos de Valladolid ahora hace una semana. Jornada complicada contra un debutante en Primera, y demostración, sobre el terreno de juego del Camp Nou, de las dificultades que este equipo puede plantear.

Que no hay rivales pequeños es un tópico, pero el Barça sabe de primera mano que eso es verdad. Y ni que sean debutantes. Ya lo sufrieron la temporada pasada contra el Girona, encajando un gol en el minuto 3, aunque acabó con goleada. Y con el Huesca no ha sido diferente. Con la ilusión de jugar en el estadio del Barça, en el minuto 2 ya se ha adelantado el Chuco Hernández. Primeros síntomas de debilidad de la defensa blaugrana en un partido en que no han estado acertados.

Messi pone el ritmo

El Barça siempre que puede fía su futuro en los cracs, y ahora hay uno que sobresale del resto: Leo Messi. A pesar del despiste inicial, el argentino, que lo entiende y lo domina todo, ha girado la situación en muy poco tiempo. Un gol y una amenaza para encarrilar la goleada.

El '10' ha puesto en marcha la máquina goleadora a partir del minuto 10 del partido, justo cuando ya ha encontrado su sitio sobre el campo. En el minuto 16, él se lo hace todo solo. Recorte dentro del área, colocación y definición con la pierna derecha.

Y el partido ha seguido la tónica que él quería. Monopolio del Barça. El conjunto catalán ha cogido las riendas del partido y se ha convertido en un generador de ocasiones sin tregua. Jordi Alba ha hecho la clásica jugada por la izquierda, Messi ha amenazado con el remate, y en el minuto 24 ha llegado el segundo. Alba ha escondido el primer pase hacia el argentino, y cuando se ha decidido a hacerlo, Pulido se ha hecho un autogol.

El Camp Nou disfruta de un festival goleador

Menos de media hora de partido, tres goles, y los 72.892 espectadores querían más. El VAR también ha querido su momento y lo ha tenido. Otra vez un activo Jordi Alba ha hecho su jugada predilecta y Luis Suárez ha rematado a gol su asistencia. Fuera de juego señalado por el asistente, pero rectificación en frío por el vídeoarbitraje.

Un festival, sólo de 3-1, que no acabaría aquí. La primera mitad ha acabado con cinco goles porque el Huesca, mediante el catalán Álex Gallar, ha hecho el 3-2 antes del descanso.

Pero la tarde ha sido un espectáculo muy interesante. Defensivamente con mucha pasividad en las dos bandas, pero ofensivamente un juego de goles. Dieciséis minutos más de la segunda mitad y tres goles más.

Primero ha sido Dembélé, reconfortado con su inicio de la temporada; después Rakitic, cogiendo el protagonismo del gol el día que podía atreverse; y más Messi, completando un doblete.

Después Messi también se ha vestido de asistente: pase hacia Jordi Alba en el tramo final, séptimo gol y liderato. Y ha habido tiempo de más. En el añadido, penalti sobre Luis Suárez, Messi se lo cede, y el uruguayo también ha hecho un doblete. Una goleada que podría haber sido mayor porque dos travesaños de Messi y Dembélé podrían haber aumentado un marcador que ya ha sido de escándalo.

El líder ha sido Messi, pero ofensivamente el Barça ha demostrado efectividad. El Huesca ha jugado con atrevimiento, para ofrecer un gran espectáculo, y el espectador lo ha disfrutado. El Barça llega al parón de selecciones con nueve puntos de nuevo posibles y cogiendo el liderato de la Liga.