Max Verstappen y George Russell tienen una relación conocida por todos. No son precisamente amigos, ni lo serán nunca, y han tenido una serie de diferencias durante los últimos años que parecen ser que no tienen solución, y se han declarado abiertamente la guerra al uno al otro. Cada vez que se encuentran en la pista saltan las chispas, y el Gran Premio de España no fue una excepción, como se pudo comprobar en un incidente.
Después del Safety Car, ambos estuvieron peleando, dejando algunas imágenes para el recuerdo. Todo comenzó en un intento de adelantamiento que el piloto de Mercedes tuvo en la curva 1, y que obligó al tetracampeón del Mundo a tener que irse largo para evitar un posible accidente. Pero a pesar de esto, el sancionado fue el neerlandés, quien se vio obligado a ceder su posición, una decisión que no le gustó, y que echa más leña al fuego en su pelea particular contra la FIA.

Cuando fue informado de la sanción a través de la radio, el ‘1’ no dudó en mostrar su disconformidad y su incomprensión, y sus gritos de enfado reflejaban la desesperación y la frustración que tenía, una cosa totalmente comprensible. Pero cuando parecía que ya estaba preparado para dejar pasar al inglés, sorprendentemente le cerró la trayectoria, un movimiento inesperado, que provocó que llegaran a tocarse, y que acabó en otra sanción para el piloto de Red Bull.
Le cayeron 10 segundos, una penalización que provocó que acabara cayendo hasta el décimo lugar, consiguiendo tan solo un punto, a pesar de que el Circuito de Montmeló es uno de sus favoritos, y fue donde logró su primera victoria. Un resultado desastroso para Verstappen, que provoca que en estos momentos tenga muy difícil poder revalidar el título, viendo como la distancia con los McLaren es cada vez más grande, después de la victoria de Oscar Piastri y el podio de Lando Norris.

Max volvió a culpar a Russell por todo lo sucedido, y el ex de Williams no se mordió la lengua, y tuvo unas declaraciones explosivas contra su rival.
Verstappen y Russell, guerra abierta
Russell aseguró que no entendía ni el enfado ni la reacción de Verstappen, considerando que la sanción le parecía justa, y llegó a decir que “igual se pensaba que era una carrera de iRacing y no de Fórmula 1”.
Max no se quedó callado, y respondió con un contundente “le traeré pañuelos para la próxima vez”.