Luis de la Fuente no quiso perderse todo lo que sucedía en el Clásico, como es evidente, y siguió con atención el partido. Y quedó francamente decepcionado con la actitud que tuvieron varios jugadores de ambos equipos cuando finalizó el choque, ya que se formó una tangana que obligó a la policía a tener que intervenir para separar a los futbolistas de ambos equipos, y evitar que llegaran a las manos. Pero la tensión que se respiraba era más que evidente.

Y esto amenaza con trasladarse al vestuario de ‘La Roja’, donde el técnico de La Rioja siempre ha intentado que sean un bloque unido, y que exista una gran relación entre todas las piezas, independientemente de la rivalidad que tengan sus clubes. Y no le gustó en absoluto ver como el capitán de la selección, Dani Carvajal, caía en las provocaciones y mostraba un comportamiento impropio de alguien con su edad y su experiencia.

Dani Carvajal 

Evidentemente, no se puede negar que Lamine Yamal se equivocó gravemente a la hora de realizar unas declaraciones tan explosivas y provocadoras tan solo unos días antes de jugar contra el Real Madrid. Faltó al respeto al eterno rival, y era lógico que los pupilos de Xabi Alonso tenían ganas de vengarse, y de callarle la boca. Pero era completamente innecesario iniciar una persecución, y que todos se fueran directamente a por la estrella del Barça cuando acabó el choque.

En especial, el ex del Bayer Leverkusen, quien se negó a darle la mano, y le recriminó que hablara tanto fuera del terreno de juego. A De la Fuente no le gustó nada este gesto, ya que el experimentado lateral debe de ser el líder de la selección española, y pronto se reencontrarán en una convocatoria, pues ambos entrarán en la lista que presente para los compromisos que tienen en el mes de noviembre. Y ya hay expectación por ver cómo estarán los ánimos.

Carvajal tendría que asegurarse de que haya unión mientras juegan con España, pero con gestos como este, será complicado. Y no parece haber aprendido de Xavi Hernández ni de Iker Casillas, que sí ejercieron como buenos capitanes, y se encargaron de firmar la paz entre ambos equipos por el bien de la selección.

De la Fuente quería que Carvajal y Lamine solucionaran las cosas en privado

Para De la Fuente, lo ideal era que Carvajal y Lamine hablaran en privado, y solucionaran las cosas. Y se esperaba que ambos tuvieran una conversación telefónica esta semana, después del Clásico, para que todo quedara resuelto.

Sin embargo, ni se ha producido ni se producirá, después de este altercado. Y Luis ya ha hablado con Dani para trasladarle su descontento, como han asegurado en Francia.