El mercado de verano comienza a agitarse y uno de los nombres que ya ha empezado a sonar con fuerza es el de Bradley Barcola, extremo del Paris Saint-Germain. Según fuentes cercanas al club parisino, Luis Enrique ha colocado al joven francés en la lista de transferibles, y varios grandes de Europa han reaccionado con interés. Entre ellos, el FC Barcelona, que sigue de cerca su situación y valora seriamente la posibilidad de incorporar al futbolista si se pone a tiro.
Barcola, de 22 años, llegó al PSG procedente del Olympique de Lyon como una de las grandes promesas del fútbol francés. Sin embargo, su protagonismo se ha reducido de manera notable en las últimas semanas. La razón principal: la competencia feroz en el ataque del equipo.
El PSG ha logrado formar un tridente ofensivo de altísimo nivel con Ousmane Dembélé, Khvicha Kvaratskhelia —fichado este pasado invierno desde el Nápoles— y Desiré Doué, la joven sensación francesa que ha irrumpido con fuerza en el esquema de Luis Enrique. Este escenario ha relegado a Barcola a un segundo plano, convirtiéndolo en un recurso ocasional más que en una pieza clave del proyecto parisino.

Luis Enrique da luz verde a su salida
Luis Enrique, que siempre ha apostado por un estilo de juego dinámico y vertical, ha encontrado en Kvaratskhelia y Doué el tipo de extremos desequilibrantes que encajan en su idea de juego. Aunque Barcola tiene talento, parece no haber terminado de convencer al técnico asturiano en términos de regularidad y adaptación táctica. Por ello, el PSG no descarta venderlo para obtener liquidez y equilibrar su masa salarial, especialmente en un mercado donde se esperan movimientos de alto nivel.
El Barça, muy atento
En el FC Barcelona, el nombre de Barcola no es nuevo. Ya en etapas anteriores había sido seguido por el área de scouting, y ahora su posible salida del PSG reabre la puerta a su fichaje. Deco, director deportivo del club, busca un extremo con desborde y proyección que pueda competir directamente con Raphinha en la banda izquierda, y Barcola encaja perfectamente en ese perfil.
El club catalán necesita reforzar su ataque sin hacer grandes desembolsos, por lo que operaciones de oportunidad como esta son especialmente valoradas. Si el PSG se muestra flexible en las condiciones de salida —ya sea una cesión con opción de compra o un traspaso por una cantidad razonable— el Barça no dudará en moverse.

Un perfil que encaja en el Camp Nou
Barcola tiene condiciones que podrían encajar muy bien en el estilo del Barça: técnica individual, capacidad para el uno contra uno, velocidad y buen control en espacios reducidos. Además, su juventud y potencial de crecimiento lo convierten en una apuesta de presente y futuro.
El problema, como siempre en el caso azulgrana, reside en el ‘fair play’ financiero. El club aún debe cuadrar números y, salvo alguna venta importante, no podrá realizar incorporaciones de coste elevado. Sin embargo, si el PSG prioriza la salida del jugador y se abre a fórmulas creativas, el fichaje de Barcola podría ser una jugada maestra de Deco.
El cartel de transferible que Luis Enrique ha colgado a Barcola ha despertado el interés del Barça, que ve en el francés una oportunidad de mercado para reforzar su ataque con talento joven y proyección. Las próximas semanas serán clave para conocer si el interés se transforma en una oferta formal y si el jugador ve con buenos ojos un cambio de aires rumbo al Camp Nou.