El Barça presenta el segundo fichaje de la temporada con los mismos cánones que lo hizo el primero. Cambio de pieza y cambio de características. Esta vez el Camp Nou y el Auditorio 1899 se ha vestido de gala para recibir con los brazos abiertos a Clément Lenglet.
Proveniente del Sevilla, el jugador francés aterriza a Barcelona para "crecer y trabajar", con ganas de tener minutos y con el gran reto de ser titular por delante de Samuel Umtiti y Gerard Piqué. A priori Lenglet, el 23º futbolista francés de la historia del Barça, viene para ser el tercer central de la plantilla, pero él no se conforma con poco.
Messi, los títulos y un sueño
Inconformista, vital y un poco asustado (en la rueda de prensa). Así ha sido el resumen de sus primeras horas ya después de haber firmado el contrato que lo liga con el Barça para las próximas cinco temporadas. Tiene 23 años, pero mucho futuro por delante.
Para Lenglet la confirmación de su fichaje es "un orgullo porque desde pequeño quería jugar en un club tan grande como el Barça". El discurso típico y habitual, pero con un punto extra de sinceridad que sus ojos delataban.
Carles Palacio
A todo eso, una de sus frases más repetidas ha sido que es un reto personal y que denota la gran competitividad ahora que ha fichado el club blaugrana. "Quiero jugar lo más posible" por una parte, pero también reiterando que "estoy a un club muy grande y con mucha competencia en mi posición, y trabajaré al máximo para estar en el campo en todos los partidos".
Reclamando la titularidad desde el primer minuto, desde la primera rueda de prensa, y también con ganas de ganar: "Todo es motivante. Jugar con Messi, poder ganar la Champions, ganar títulos como la Liga, la Copa del Rey...".
Central, pero con ADN Barça
Éric Abidal, secretario técnico del Barça, y Jordi Mestre, vicepresidente deportivo del club, han defendido que Lenglet "es un futbolista de presente y de futuro". Y es bien cierto porque en el Sevilla esta última temporada era titular. Y esta manera de jugar bien particular lo ha hecho llegar a can Barça.
Él se ha definido futbolísticamente como un defensa central que tiene "salida de balón, zurdo y que intenta jugar fuerte pero sin hacer faltas". Acierto total si se cumplen las expectativas, porque el Barça lo que quiere son futbolistas con estas características.
Carles Palacio
Y otro aspecto positivo es que tiene claro a qué se juega en el Camp Nou: "Me tengo que acostumbrar al Barça porque tiene un juego diferente al resto de clubs". Lenglet dice que se tiene que habituar en los entrenamientos y también en los partidos, que precisamente podría debutar oficialmente el día 12 de agosto en la Supercopa de España contra su exequipo, el Sevilla.
Una muestra de personalidad e inteligencia fue cuando todavía era futbolista del Nancy y rechazó fichar por la Juventus. Ahora confiesa que tiene "una oportunidad con el mejor club del mundo y posiblemente única". Por este motivo destaca que ha acabado en el Barça.
Y también ha relatado la larga espera hasta que ha sido blaugrana: "Siempre me habían dicho que estaba controlado y estaba preparado para venir". Una espera que ahora quizás tendrá que gestionar Adrien Rabiot, el centrocampista francés del PSG, que gana esteros para ser el tercer fichaje del segundo año de Ernesto Valverde en el banquillo blaugrana. Y Lenglet ya aprovechado para abrir sus brazos a la llegada de su "amigo" Rabiot.