El nombre de Julián Álvarez vuelve a colocarse en el centro de la escena en el mercado de fichajes. El delantero argentino, que está viviendo un momento brillante en el Atlético de Madrid, ha dejado entrever cuáles serían sus planes de futuro en caso de que la temporada no acabe con títulos para los colchoneros. Y su decisión es clara: si debe salir, su destino soñado es el FC Barcelona.
Una temporada clave en el Atlético
Julián se ha consolidado como la gran estrella del conjunto dirigido por Diego Simeone. Su capacidad para aparecer en los momentos importantes, ya sea con goles o con asistencias, lo ha convertido en un jugador indispensable. Sin embargo, el propio futbolista es consciente de que necesita competir por los máximos trofeos para continuar creciendo en su carrera.
En el Atlético todavía hay confianza en luchar por la Liga y la Champions League, pero Julián tiene muy presente que, si el equipo no responde en las grandes citas, será momento de dar un salto. Y es ahí donde entra en juego el Barça.
El Barça, en su cabeza
Desde hace tiempo, en los pasillos del Camp Nou circula la idea de que Julián Álvarez estaría encantado de vestir de azulgrana. Fuentes cercanas al vestuario culé señalan que el argentino siempre ha tenido al club en alta estima y que le atrae la idea de compartir ataque con jóvenes como Lamine Yamal y Pedri.
El Barça, además, busca un delantero que pueda ocupar el lugar de Robert Lewandowski a medio plazo, y Julián encaja a la perfección en ese perfil. Se trata de un futbolista que no solo vive del gol, sino que también entiende el juego colectivo y puede asociarse con los mediapuntas.
Laporta y Flick lo ven con buenos ojos
El presidente Joan Laporta está al tanto de la situación y sabe que sería un fichaje ilusionante para la afición. La cláusula de salida no sería baja, ya que el Atlético pretende retener a su figura, pero en la directiva azulgrana creen que con la voluntad del jugador y un proyecto deportivo sólido, la operación podría desbloquearse.
Por su parte, Hansi Flick considera que Julián tiene el carácter y la polivalencia necesarias para adaptarse a su sistema. Puede jugar como ‘9’ o como segundo punta, lo que daría al Barça variantes muy interesantes en ataque.
Decisión tomada
Lo cierto es que la pelota está ahora en el tejado del Atlético. Julián Álvarez está feliz en Madrid, pero no quiere quedarse sin competir por los títulos grandes. Si la temporada no acaba con éxitos para los colchoneros, el argentino lo tiene decidido: pedirá salir y hará todo lo posible para que su destino sea el Barça.