"Nunca he discutido con Luis Enrique". Claro y contundente Jordi Alba en la ciudad deportiva de Las Rozas durante la concentración de la selección española de fútbol. Parece que finalmente el lateral del Barça cierra el debate entorno la polémica sobre la mala relación con Luis Enrique Martínez.
Dos personas con carácter
Desde el cambio de entrenador en el combinado nacional que el defensa de L'Hospitalet había dejado de ser uno fijo en las convocatorias de España. Pero esta vez vuelve con más ganas y después de haber demostrado con su club que no hay ningún futbolista mejor que él en su posición.
Alba ha reconocido que durante su última temporada en el Barça no conjugó con las ideas del míster asturiano por su cambio de rol y por el hecho de no disfrutar de tantos minutos. Jordi Alba, un futbolista ambicioso y con ganas de jugarlo todo, también ha explicado cómo "Luis Enrique es un técnico con carácter y yo también lo soy como jugador".
EFE
Nunca ha dicho una mala palabra a Luis Enrique, o al menos eso vende de cara al público. El lateral del Barça también asegura que el asturiano "lo ayudó mucho en el Barça" y que "es una persona muy buena pero tiene sus decisiones". Ahora quien manda en la selección es Luis Enrique, un viejo conocido durante tres años en el Barça. "Es un grandísimo entrenador y no sé si yo lo querré ser, pero lleva una gran carrera y ha ganado muchos títulos", ha añadido sobre el técnico asturiano.
Volver a ser internacional
Lo que es cierto es que Alba, después de demostrar que no tiene rival en su posición, tenía que volver sí o sí a la selección española. "Estoy haciendo una temporada muy buena y me siento muy cómodo", repite un Jordi Alba muy confiado en su fútbol. "En su día mostré mi deseo de volver", y el día ha llegado.
Muy contento de volver a la selección, el lateral de L'Hospitalet, un poco cansado de tanta pregunta sobre los presuntos problemas con Luis Enrique, se ha mostrado "agradecido" por todas las muestras de apoyo durante su ausencia de las convocatorias. Alba, que debutará en la Nations League, confirma que durante los días que veía España desde casa se lo había tomado "con calma", pero que "ha madurado mucho".
"Esta vez me ha hecho más ilusión", ha confesado. Y a todo esto también dice que representar al país en la selección española es "un premio". Ahora sólo queda que la pelota vuelva a rodar. El primer partido será este jueves en el último partido de la jornada de grupos contra Croacia, y después un amistoso el domingo contra Bosnia y Herzegovina.