El futuro de Frenkie de Jong vuelve a estar en el centro de la actualidad del FC Barcelona. El mediocentro neerlandés termina contrato este mismo verano y, pese a que tanto el jugador como el club han transmitido públicamente su voluntad de seguir juntos, la renovación todavía no se ha cerrado. Mientras tanto, en el entorno azulgrana crece la inquietud porque el futbolista maneja propuestas muy tentadoras desde Arabia Saudí.
El Barça pierde la paciencia
En la directiva azulgrana no esconden cierta frustración por cómo se están alargando las negociaciones. De Jong siempre ha sido un futbolista clave, tanto en los planes de Hansi Flick como en los de la dirección deportiva, pero el hecho de que aún no haya estampado su firma genera dudas. El Barça le ha puesto sobre la mesa una propuesta de continuidad adaptada al nuevo contexto salarial del club, con un contrato largo y estabilidad en el proyecto. Sin embargo, las cifras que llegan desde Arabia son difícilmente igualables.
Hay varios clubes interesados en convertir a De Jong en uno de los pilares de la Saudi Pro League, con un sueldo que triplicaría lo que percibe en el Barça. La diferencia económica es tan grande que en el club asumen que la decisión del neerlandés no dependerá solo del dinero, sino de sus ganas de seguir compitiendo al máximo nivel en Europa.
El compromiso del jugador
Pese a las dudas externas, lo cierto es que De Jong siempre ha expresado su deseo de continuar en el Camp Nou. El centrocampista se siente identificado con el proyecto, valora el papel que tiene en el equipo y mantiene una relación muy positiva con Flick. Además, en el vestuario es uno de los líderes silenciosos, respetado por su profesionalidad y su peso en los momentos importantes.
No obstante, su entorno admite que el jugador está escuchando las ofertas que llegan, consciente de que a sus 28 años podría firmar uno de los contratos más importantes de su carrera.
Todo apunta a la continuidad
En el Barça confían en que, pese al ruido, De Jong renovará. Tanto Joan Laporta como Deco consideran que su salida sería un golpe muy duro para el proyecto deportivo y están dispuestos a hacer un esfuerzo para retenerlo. El neerlandés, por su parte, entiende que en el Camp Nou tiene la oportunidad de seguir compitiendo por todos los títulos, algo que no encontraría en Arabia.
Las conversaciones seguirán en las próximas semanas, pero todo indica que habrá final feliz y que Frenkie seguirá siendo uno de los pilares del Barça del presente y del futuro.