El Barça está en un momento de crisis económica y necesita que sus jugadores rindan al máximo porque parece que tendrá muy difícil fichar. La única opción sería si antes se venden futbolistas y el club blaugrana tiene ingresos para después poder gastárselos. Y quien entra en esta lista de transferibles es Ansu Fati, quien ya hace unos años que es considerado como el heredero de Leo Messi.
Las dudas del Barça con Ansu Fati
Ansu Fati no acaba de ser aquel jugador diferencial que era hace unos años. Las lesiones que ha tenido lo han dejado tocado y su recuperación no ha sido como se esperaba. Pero por eso también hay que ver cómo tampoco ha tenido la confianza esperada. En primer lugar, los entrenadores han sido demasiado precavidos con su situación. Y, en segundo lugar, Ansu Fati tampoco ha sido lo suficientemente confiado con su cuerpo.
Es por eso que ahora mismo todo el mundo duda de Ansu Fati. Además, también se ve claramente su frustración en cada partido que pasa. En las últimas semanas se lo ha visto precipitado y demasiado impreciso cuando ha jugado. Y eso ha generado todavía más malestar con su situación.
Si Ansu Fati no marca goles entonces todavía está más enfadado con él mismo. Y el delantero culé está decepcionado, triste y no muestra su mejor versión. Pero eso no puede seguir eternamente, ya que desde el Barça necesitan que marque goles y que sea muy importante. Si no es así, tendrá que dar un paso al lado y coger otro camino.
Ansu Fati pierde valor
Y los que están más hartos de Ansu Fati son el Barça y Nike, que es el patrocinador de la camiseta culé. Si se quiere hacer negocio con Ansu Fati y una posible venta, ahora ya no es como hace un tiempo. Si el pasado verano, hace 7 meses, se recibieron ofertas de cerca de 100 millones de euros, ahora ya han bajado de manera considerable y llegarán como mucho a los 40 millones.
Por lo tanto, eso significa que la salida de Ansu Fati puede resolver algunos problemas económicos, pero tampoco muchos. Desde el club blaugrana ya no se plantean una venta como hace unos meses, ya que lo que sacarían de la venta quizás ya no compensa tanto y todavía serviría más tenerlo en el banquillo como revulsivo que desprenderse de ello.
Así pues, siguen las dudas con Ansu Fati y todavía no se sabe qué pasará con él. El delantero culé sigue siendo suplente habitual y no parece que su situación tenga que cambiar próximamente. Y lo más probable es que tenga oportunidades, pero dependerá de su rendimiento la decisión de que se tome a final de temporada.