El Barça está muy pendiente del mercado de fichajes, pero el Girona todavía lo está más. Y cuando se trata de jugadores en crecimiento, en Montilivi saben que pueden tener más minutos y más protagonismo. Por esto el club gerundense está tanteando el terreno y podría pagar una cláusula de rescisión de un futbolista sin tener que negociar con Joan Laporta por el fichaje.
El Girona necesita reforzar su equipo
La realidad es que el Girona necesitará nuevos refuerzos el próximo verano. La buena temporada actual hace que el equipo catalán se tenga que consolidar y mantener el nivel. Por esto tendrá que tener un equipo titularísimo y un gran banquillo. Y también por esto tiene que reunir a más futbolistas de gran talento.
Y una de las posiciones del campo que tanto Míchel Sánchez, el entrenador, como Quique Cárcel, el director deportivo, quieren reforzar es la defensa. Es detrás donde el Girona ha tenido gran parte del éxito esta temporada. Una buena defensa, sólida y sin fisuras, pero que pueda aguantar toda la temporada. Y que las bajas no impidan que se siga jugando a un gran nivel.
El Girona quiere fichar a Mika Mármol
Y el Girona ya se ha fijado en Mika Mármol, defensa catalán que actualmente juega en el Las Palmas, tal como apunta el Sport. El central de Terrassa, ex del Andorra y formado en el Barça, jugando en el filial culé y debutando con el primer equipo dirigido por Xavi Hernández en la penúltima jornada de la Liga 2021/22 contra el Getafe, podría dar un nuevo salto de calidad. Está haciendo una gran temporada en el equipo canario, siendo titular indiscutible, y siendo el líder de la defensa.
Y como va a más y su progresión es muy buena, desde el Girona están dispuestos a ficharlo el próximo verano. Solo tiene 22 años y está capacitado para ser titular en el club catalán. Y sería un fichaje más o menos asequible para un Girona que necesita consolidar su equipo a base de hacer fichajes de calidad, pero sin pagar ningún sobreprecio.
Sería un traspaso que también daría dinero al Barça, ya que el club blaugrana tiene el 50% de los derechos de una posible venta. Sin embargo, el Girona no tendría que negociar ni con el Barça ni con el Las Palmas si acaba pagando la cláusula de rescisión, que es de 10 millones de euros. Encajaría a la perfección con el estilo de juego que practica el Girona, y también podría ser una pieza clave con el paso de los partidos. Un fichaje de primer nivel para el Girona, y que de paso daría un dinero extra al Barça.