Algunos aficionados del Betis han aprovechado la visita del Girona al Benito Villamarín para hacer gala de su catalanofobia. Durante varios tramos del partido, los seguidores verdiblancos se han dedicado a entonar cánticos cómo el "Que viva España" para provocar la afición visitante y los millares de espectadores catalanes que miraban el duelo, que el equipo de Setién se ha acabado llevando por 3 a 2.

S in embargo, sus cánticos no han sido la única provocación. Durante los 90 minutos de partido, un seguidor local situado justo detrás de una de las porterías del estadio se ha dedicado a exhibir una bandera española con el número 155 dibujado sobre la tela.

No es la primera vez que la afición del Betis demuestra una catalanofobia alarmante. La temporada pasada, la visita del Barça al Villamarín también sirvió de excusa para que gran parte de los seguidores andaluces demostraran que los catalanes no son bienvenidos en muchos estadios de España.