Una de las peores noticias de la temporada en clave blaugrana fue la grave lesión de rodilla que Gavi sufrió en un partido de la selección española. El jugador andaluz estaba siendo el mejor jugador del Barça, aportando carácter y calidad en el centro del campo de un equipo que no había empezado nada bien la temporada. 

El regreso de Gavi, pues, es uno de los momentos más esperados por parte del Barça, un hecho que no se producirá hasta el próximo verano. El problema es que nadie tiene la garantía de que Gavi vaya a volver en plenas condiciones, y menos después de lo sucedido recientemente con Ansu Fati, que desgraciadamente es una sombra del delantero que parecía que iba a comerse el mundo.

Gavi, lesionado durante el España - Georgia / Foto: EFE
Gavi, después de lesionarse en el España-Georgia / Foto: EFE

Gavi, un año para recuperar su mejor versión

Es por ello que el Barça se ha propuesto recuperar la mejor versión de Gavi la temporada que viene. El centrocampista va a ser clave para Xavi Hernández, un jugador fundamental, aunque el plan del Barça es el de reforzar el centro del campo este verano, por si Gavi necesita más tiempo para coger la forma. Eso sí, si pasada la temporada 2024/25 el jugador no levanta cabeza, al Barça no le quedará más remedio que buscarle una salida, para que no se repita otro caso Ansu Fati, al cual se le aguantó demasiado tiempo, para acabar cediéndoselo al Brighton.

Aún y así, la confianza del Barça en Gavi es total, tanto porque la operación a la que se sometió fue todo un éxito como, no menos importante, por el carácter competitivo de Gavi, lo que le está permitiendo no venirse abajo y seguir trabajando día tras día en busca de regresar lo antes posible a los terrenos de juego.

Pablo Gavi Barça / Foto: EFE
Gavi, celebrando un gol con el Barça / Foto: EFE

La mala suerte del centro del campo del Barça

Y es que el Barça no está teniendo demasiada suerte con su centro del campo. El primer grave problema llegó con Pedri, el jugador llamado a ser el líder de la medular blaugrana, pero que desde que lo jugó todo el año 2021 ha ido encadenando lesiones musculares, hasta perder participación y protagonismo en el Barça. Luego llegó el caso de Frenkie de Jong, que llegó al Camp Nou como uno de los centrocampistas más prometedores del panorama internacional. El neerlandés, sin embargo, nunca ha sido el líder del centro del campo del Barça, a pesar de todas las oportunidades que ha tenido.

Y este año, con la salida de Sergio Busquets, en el Barça daban por hecho que Oriol Romeu asumiría el reto, sobre todo después de ver su gran pretemporada. El de Ulldecona, sin embargo, no tardó en demostrar que el reto le iba grande. Solo faltaba la grave lesión de Gavi.