La Fundación de la Unión de Federaciones Deportivas de Catalunya (UFEC) ha presentado la Welcome League, un proyecto de inserción a través del deporte para personas en riesgo de exclusión social.

La competición es una liguilla de fútbol 7 y la disputan colectivos como personas refugiadas y en demanda de asilo, sin techo y menores inmigrantes no acompañados. Algunos de ellos forman parte del proyecto INSERsport, también de la UFEC, que forma a chicos y chicas para que puedan acceder al mercado laboral ejerciendo como árbitros o monitores de ocio.

Milena de Murga es la psicóloga y coordinadora de la iniciativa Welcome League: "El proyecto nos ayuda en todos. No sólo a los sin techo o a los refugiados, es muy enriquecedor también para los voluntarios. Compartir espacios con esta normalidad, con gente que no conoces, te convierte en un agente de cambio", ha asegurado.

La psicóloga ha explicado que la idea ha conseguido que las personas que lo integran "practiquen el idioma, hagan deporte y, además, conozcan a otros colectivos".

En la liguilla también tienen un papel clave entidades y administraciones como la Fundació Arrels, CCAR, Acathi, o la Residencia Maria Feixa; que a menudo son quienes presentan el proyecto a las personas en riesgo de exclusión.

El testimonio de Mouhamed

Mouhamed Dia es de Senegal, tiene 21 años, y llegó a España hace doce años. Sus padres vivían en Granada pero no encontraban trabajo, de manera que decidió buscarse la vida él solo y vino a Barcelona.

"Aquí he llegado a dormir en la calle, y es muy duro", reconoce. Ahora mismo Mouhamed vive en la residencia Maria Feixa y, mientras tanto, se distrae con el fútbol: "Me activa las neuronas, me permite pasar el rato y olvidar los problemas", explica.

Después de sufrir un ataque de pánico por culpa de la ansiedad provocada por su situación, ahora ha conseguido formarse para trabajar en una empresa de limpieza de aviones.

"Aquí nadie pregunta porque están aquí"

Richard Font es el encargado de arbitrar la liguilla y también ha entrenado uno de los equipos. Explica que conoció el proyecto porque forma parte de la Federación Catalana de Fútbol Sala y se muestra orgulloso de la evolución de los integrantes: "Se nota como con el paso del tiempo se cohesionan y juegan más en equipo", dice.

Richard tiene claro porque juegan al fútbol: "Estar aquí les ayuda olvidar un poco lo qué les ha pasado", dice, y añade: "Ellos no hablan de su pasado y no es necesario saberlo, con qué se lo pasen bien es suficiente".