Xavi Hernández no quiere saber absolutamente nada de muchos jugadores de la plantilla del Barça, ni tampoco de los que actualmente se encuentran a préstamo en otros conjuntos, a excepción de Nico González o de Ez Abde. Pero en el caso de Samuel Umtiti, Álex Collado o Clément Lenglet, tienen las puertas cerradas, y no tienen absolutamente ninguna posibilidad de regresar. De hecho, se busca un nuevo destino para todos ellos.
Y también para Sergiño Dest, que ha vuelto a fracasar en su nueva etapa. Se marchó al AC Milan cansado de las pocas oportunidades que tenía, y confiaba en poder recuperar la confianza en sí mismo. Cree que fue tratado de manera injusta por el técnico egarense, que lo relegó a un discreto segundo plano, pese a que venía de ser una pieza fundamental en los esquemas de Ronald Koeman, jugando como lateral derecho e incluso como extremo.

Su rendimiento no fue malo del todo, aunque es cierto que nunca acabó de convencer, pero el internacional estadounidense no se explica por qué le pusieron la cruz en el Camp Nou. Su misión en la Serie A era callar bocas, y demostrar las cualidades que le llevaron a ser considerado como uno de los defensas más prometedores del continente, lo que llamó la atención de conjuntos como la Juventus de Turín, el Bayern de Múnich, el Borussia Dortmund o el Chelsea.
Pero desgraciadamente para el ex del Ajax de Ámsterdam, en San Siro ha vuelto a decepcionar a todos, tal y como le ocurrió en el Barça. No ha tenido prácticamente oportunidades, aunque las lesiones no le han ayudado en absoluto, y cuando ha ingresado al terreno de juego ha dejado sensaciones muy pobres. Lógico, por lo tanto, que Xavi ni siquiera se haya planteado la posibilidad de dejarle hacer la pretemporada, y ha exigido a Joan Laporta que lo traspase lo antes posible.
Afortunadamente para todos, Mateu Alemany parece haber encontrado a un conjunto que estaría dispuesto a hacerse con los servicios de Dest.
Dest puede acabar en la Bundesliga
Dest puede probar suerte en la Bundesliga, después de que el Union Berlín se haya interesado muy seriamente en su incorporación, y pueda pagar los cerca de 15 millones de euros que el Barça está solicitando por el lateral de 22 años de edad.
Allí, podría seguir disputando la Champions League. Xavi no quiere volver a verlo jamás.