La selección francesa ha remontado Irlanda gracias a dos goles de Antoine Griezmann para avanzar hacia los cuartos de final. Los de Deschamps han cambiado el marcador en una gran segunda parte después de que los irlandeses se avanzaran en el marcador con un gol de penalti en los primeros minutos de partido. El rival de los franceses saldrá del cruce entre Inglaterra e Islandia. 

Robbie Bardy sembró todas las dudas del mundo a los seguidores franceses que se reunieron en el Estadio del Olympique de Lyon. El héroe de la clasificación de Irlanda para octavos ha transformado el penalti que, inocentemente, ha cometido Paul Pogba sobre Shane Long.

El gol, el más rápido de esta Eurocopa y el segundo a la historia del torneo. Francia se ha encontrado con un panorama que no tenía ni mucho menos previsto, ante una selección como la irlandesa que se caracteriza por una sólida y compacta defensa.

Deschamps salió con el once de gala y con el que empezó el torneo y las sensaciones no fueron buenas. El seleccionador francés ha tenido que recurrir al banquillo para hacer entrar Kingsley Coman a la media parte. 

Francia le ha cambiado la cara al partido y Antoine Griezmann ha sido el mejor de los maquillajes. El delantero del Atlético de Madrid ha sido decisivo cuando el miedo y los nervios sobrevolaban la selección francesa. Griezmann ha conectado un coscorrón dentro del área para poner la primera piedra del remontamiento.

Francia ha empatado pero no ha visto saciada su hambre. Tenía el rival entre las cuerdas y lo ha aprovechado, otra vez, Griezmann. En una jugada colectiva para enmarcar, una dejada de Olivier Giroud ha dejado solo al delantero colchonero que no ha perdonado delante de el portero.

Remontamiento conseguido y todavía quedaban casi 30 minutos por delante. La expulsión con roja directa del irlandés Duffy ha ayudado a que el campo se inclinara hacia el lado irlandés y sólo la falta de acierto de los franceses ha hecho que las diferencias no se plasmaran en el marcador final. 

Alemania enseña las uñas (3-0)

La selección alemana ha pasado por encima de Eslovaquia como una apisonadora y ha mandado un mensaje a todos los aspirantes al título en esta Eurocopa. La goleada por tres a cero, a pesar de fallar un penalti, es toda una declaración de intenciones de un equipo que ya espera rival a los cuartos de final (Italia o España).

Los alemanes han ofrecido la mejor cara desde que empezó el torneo, trayendo la iniciativa del juego sin dar ni una posibilidad en Eslovaquia. Liderada por un Julien Draxler estelar, Alemania ha encontrado el camino del gol bien temprano. El central de Bayern Jérome Boateng ha aprovechado un mal refús de un córner para deshacer el empate inicial.

Cinco minutos después, el defensa eslovaco Martin Skrtel ha cometido un penalti sobre Thomas Müller pero Mesut Özil lo ha fallado. El asedio alemán ha continuado y Mario Gómez, delantero centro, ha hecho subir el 2-0 al marcador. Draxler, después de una gran jugada individual, le ha servido el gol en bandeja a Gómez que sólo ha tenido que empujar la pelota.

El partido ha bajado de pulsaciones y Alemania, con la clasificación al bolsillo por la incomparecencia de Eslovaquia, se ha dedicado a dosificar esfuerzos. Aún así, Draxler todavía ha tenido tiempo para completar su gran partido con un gol, al aprovechar una pelota muerta dentro del área pequeña.