Fernando Alonso es, como no podría ser de otra manera, la alternativa más suculenta del mercado de pilotos libre de cara a 2025. El bicampeón español acaba contrato con Aston Martin a la conclusión de la presente temporada y es uno de los potenciales fichajes, por ejemplo, de Toto Wolff para Mercedes.
El Team Principal de la escudería alemana tiene que cubrir la baja de Lewis Hamilton y a nivel mediático, sin duda, el español es su mejor opción. No obstante, el propio Alonso catalogó a Mercedes de opción "poco atractiva" después de la carrera de Japón al considerar que "están por detrás nuestro".
Red Bull y la incógnita Verstappen
La puerta Mercedes es, evidentemente, la más flagrante y la más abierta. La urgencia de llenar el vacio de un piloto del legado de Hamilton se combina con el hecho de que es la única escudería que, a estas alturas, ya tiene una vacante. Mientras tanto, es Carlos Sainz el único hombre que ya sabe que cambiará de equipo de cara a la próxima temporada y, precisamente, es el piloto más en forma durante la presente campaña con el permiso de Max Verstappen.
El de Red Bull está en su propia galaxia desde hace dos temporadas, pero la hegemonía del binomio Verstappen-Red Bull podría llegar a su fin por el lío que hay montado dentro del box de la escudería austríaca a raíz del Caso Horner. Sea como sea, está por ver si el orgullo del padre del piloto, Jos Verstappen, y la rumorología de que Helmut Marko también dejaría el equipo con los neerlandeses está por encima de la carrera del tricampeón.
La rumorología de su posible salida hacia Mercedes cobra fuerza, pero en vista del flojo inicio de temporada de la marca de la estrella, parece, prácticamente, un salto al vacío apostar por cambiar Red Bull por Mercedes. Aquí es donde entra Fernando Alonso, ya que si se acabara marchando Verstappen, el asturiano es la opción preferida para Christian Horner. Además, también existe la posibilidad de que Checo Pérez, que también acaba contrato este 2024, deje una vacante en el box de las bebidas energéticas. A pesar de todo, hasta la fecha, el mexicano está cuajando una gran temporada, satisfaciendo los deseos de la escudería de poder meter presión a su compañero de equipo. Todo lo resolverá el tiempo, pero, de momento, las aguas parecen bastantes movidas y vaticinan una parrilla muy cambiada de cara a la próxima campaña. Aparte de Checo, Alonso y Sainz, también los dos pilotos de Alpine, Sargeant y Lance Stroll quedan libres a finales de año.