Carlos Alcaraz continúa intratable en Roland Garros. De momento, todavía no ha encontrado rival y ya se ha clasificado para las semifinales, donde se enfrentará a Lorenzo Musetti. Después del sorteo, se preveía un torneo fácil para el murciano, al menos hasta la final, pero de momento se han superado todas las expectativas. Su última exhibición en la Philippe Chatrier dejó a todo el mundo con la boca abierta. 6-0, 6-1 y 6-4 contra Tommy Paul, el número 12 del mundo, en solo 1 hora y 34 minutos. Un triunfo que sirve para intimidar y enviar un mensaje a Jannik Sinner, su máximo rival.

El mensaje de Carlos Alcaraz en Sinner

Hacía tiempo que no se veía una victoria tan exagerada en unos cuartos de final de Grand Slam. Ha sido un partido dominado desde el primer golpe por Carlos Alcaraz. Cuando el murciano alcanza estos niveles de inspiración, es invencible. Su irregularidad, sin embargo, a veces lo condena. De momento, en este Roland Garros todavía no ha aparecido. Su próxima parada son las semifinales, contra un Lorenzo Musetti que se ha deshecho de Tiafoe en cuartos. De nuevo, el reciente campeón de Roma y Montecarlo volverá a partir con un rol de favorito claro.

Ahora bien, las cosas cambiarán mucho en la hipotética final. En esta instancia, ya se tendrá que enfrentar a Jannik Sinner, Novak Djokovic y Zverev. Sería una sorpresa mayúscula que el finalista en este lado del cuadro fuera Bublik. Sea como sea, Alcaraz ya tiene la mirada centrada en una posible final contra Sinner, con quien tiene una rivalidad destinada a convertirse en historia del tenis. "Jannik es uno de aquellos jugadores que me encanta ver jugar, y no es que me apunte nada en una libreta, pero me lo quedo a la mente. Con el nivel que está jugando y como va ganando, también te inspira un poco a dar tu mejor nivel a los partidos e intentar ahorrar energía en todo el posible", ha afirmado el murciano.

Las disculpas de Carlos Alcaraz con el público francés

Es muy poco habitual ver un partido de Grand Slam, que se disputa al mejor de cinco sets, de poco más de una hora. Más todavía si se trata de unos cuartos de final. Pero la superioridad de Alcaraz ante Tommy Paul ha sido tan grande que el duelo se ha sellado en solo 1h y 35 minutos. Fue una exhibición del murciano, pero el público de Philippe Chatrier se quedó con ganas de más.

Consciente de ello era Carlos Alcaraz, que ha querido tener unas disculpas irónicas con la afición reunida en las gradas: "Sabía que queríais ver más tenis, pero he tenido que hacer mi trabajo". Una noche idílica para el murciano, que volverá a la pista el próximo viernes, con billete para la gran final en juego.