El arranque de la temporada 2025/2026 ha traído más sombras que luces para Phil Foden, la joya inglesa que alguna vez fue considerada el futuro del Manchester City. Su nombre, que antes inspiraba respeto en la Premier League, hoy se pronuncia con un dejo de decepción. “Es el nuevo Grealish”, se lee una y otra vez en redes sociales, una frase que ha incendiado el debate y que parece describir a la perfección la situación del mediapunta británico.
Aunque Pep Guardiola lo ha mantenido como titular en la mayoría de los encuentros, el rendimiento del jugador está lejos de justificar su estatus de estrella. Con una precisión de pase superior al 86%, Foden sigue siendo un engranaje táctico útil, pero su impacto ofensivo ha desaparecido. La pírrica cosecha de apenas dos goles y dos asistencias hasta la fecha refleja la desaparición de la chispa ofensiva y la capacidad desequilibrante que alguna vez lo perfiló como el talento más prometedor de su generación. Foden luce desdibujado y apagado, y su versión actual genera una creciente impaciencia en la afición, que exige que su indiscutible valor posicional se traduzca en una eficacia directa que justifique su presencia constante en el once.
Foden bajo sospecha: Guardiola repite la historia de Grealish
En el Etihad se respira un aire de déjà vu. La historia recuerda demasiado al caso de Jack Grealish, aquel fichaje millonario que costó 117,5 millones de euros en 2021 y que nunca terminó de encajar en el sistema de Guardiola. Tras cuatro temporadas de altibajos, títulos colectivos pero escaso brillo individual, el técnico catalán dio el paso más contundente: cederlo al Everton.
Ahora, todo apunta a que Foden podría seguir el mismo camino. Las comparaciones son inevitables y, en el vestuario, se comenta que Pep está cansado de esperar su explosión definitiva. El entrenador exige resultados inmediatos, no promesas. Según fuentes cercanas al club, Guardiola habría puesto a Foden en la rampa de salida si su rendimiento no mejora antes del mercado invernal.
Arda Güler, el capricho de Pep Guardiola para el City 2026
Mientras tanto, el técnico catalán ya tiene en mente a su sustituto ideal: Arda Güler, la perla turca del Real Madrid. Con solo 20 años, el mediapunta se ha ganado un lugar fijo en el esquema de Xabi Alonso, con 3 goles y 5 asistencias en 11 partidos. Su zurda exquisita y su lectura de juego han enamorado al madridismo… y también a Guardiola.
El City ya habría hecho llegar sus primeras señales al club blanco. Sin embargo, en Madrid la respuesta es tajante: Güler no está en venta. El jugador tiene contrato hasta 2029 y una cláusula de 1.000 millones de euros, una muralla económica que frena cualquier intento inglés. Desde la cúpula del Bernabéu aseguran que el turco es una pieza “intocable” en el proyecto de Alonso, quien no escatima elogios al describirlo como una mezcla entre Özil y Guti.
El Manchester City, sin embargo, no se rinde. Guardiola habría pedido a la directiva “un esfuerzo especial” por Güler, consciente de que el relevo generacional es urgente. Mientras tanto, la presión sobre Foden se multiplica. Las críticas se intensifican, los minutos pesan y la sombra de Güler empieza a proyectarse sobre el Etihad.