Luis Enrique se despidió de la selección española reconociendo algunos errores que había cometido durante el Mundial de Qatar, y que provocaron que solamente pudieran ganar un partido, el inaugural frente a Costa Rica. En la fase de grupos acabaron como segundos, por detrás de Japón, y en octavos de final cayeron, contra todo pronóstico, contra Marruecos, en la tanda de penaltis. Ese fue el único choque en el cual Pablo Sarabia dispuso de minutos.
El resto los tuvo que ver desde el banquillo, a pesar de haber sido muy importante en la fase de clasificación y en la última Eurocopa. El jugador del Paris Saint-Germain entró al terreno de juego a falta de pocos instantes para que sonara el pitido final, y tuvo una oportunidad clarísima para marcar el gol de la victoria, pero el palo se lo denegó. Posteriormente, no estuvo acertado desde los once metros, y falló su pena máxima, como hicieron todos sus compañeros.
‘Lucho’ se disculpó públicamente en rueda de prensa con el atacante de 30 años, admitiendo que debería de haber tenido más participación, pues había quedado impresionado con su rendimiento. Lamentablemente, ya era demasiado tarde, pues estaban en la calle. Y ahora es una incógnita saber si el nuevo entrenador de ‘la Roja’, Luis de la Fuente, seguirá confiando en un crack que prácticamente no juega nada en su equipo.
Precisamente por esa razón, para poder tener más oportunidades de seguir representando a España, Sarabia ha pensado en un cambio de aires en el mercado invernal. Si Christophe Galtier no le garantiza más continuidad en el Parque de los Príncipes, hará las maletas tal y como lo hizo el año anterior, cuando se marchó a préstamo al Sporting de Portugal. Una decisión muy acertada, pues en Lisboa recuperó la confianza en sí mismo, e hizo una campaña espectacular.
Una cosa que le sirvió para tener una segunda oportunidad en el PSG, si bien su situación no ha cambiado con respecto a la primera etapa que pasó. Por ese motivo, parece que lo mejor que puede hacer es irse.
Sarabia puede regresar al Sevilla
Y se le ha abierto una puerta para regresar a La Liga Santander. Porque Sarabia dejó un gran recuerdo en el Sevilla, donde se convirtió en la estrella del equipo, lo que le valió para que Nasser Al-Khelaïfi se interesara por él y decidiera hacerse con sus servicios, hace ya más de tres años.
El ex del Real Madrid y del Getafe podría ser un refuerzo de lujo para Jorge Sampaoli, y ayudaría a pelear para evitar el descenso, pues actualmente son antepenúltimos. Monchi está trabajando para ello.