Los derbis entre Barça y Girona comenzaron siendo duelos entre dos clubes hermanados, pero que poco a poco van cogiendo tensión. Los resultados del conjunto gironí, que le hacen estar 4 puntos por encima de los culés, hacen que este enfrentamiento no se pueda ver como un encuentro entre dos clubes con intereses competitivos muy diferentes.
A la lucha por la Liga que hay entre ambos equipos por el momento, se suma la tensión que ha habido entre ellos durante las negociaciones de algunos jugadores. Oriol Romeu, quien era uno de los jugadores fundamentales para Míchel Sánchez, abandonó Girona para unirse a las filas de Xavi Hernández en sustitución de Sergio Busquets. No sin que ambas entidades tuviesen problemas para decidir el precio de traspaso. En el sentido contrario, Pablo Torre y Eric García dejaron el Camp Nou para irse cedidos al conjunto blanc-i-vermell. Precisamente, el defensa ha sido protagonista en las últimas horas por unas palabras de su anterior técnico.
Eric García y la cláusula del miedo
En la rueda de prensa previa al partido, Xavi afirmó que "le pondría cláusula (del miedo) a todo el mundo. Veo ilógico que un futbolista juegue contra ti. Estará extramotivado, como pasó con João Félix. Con Eric no la pudimos poner a última hora". El defensa catalán se unió al Girona en el último día de mercado. La necesidad de aligerar la masa salarial para poder inscribir los dos Joaos provocó, según el técnico de Terrassa, que no se pudiera pactar una cláusula del miedo.
Así se demuestra en el caso de Pablo Torre. La cesión del centrocampista se anunció el 18 de julio, con mucho margen para planificar la temporada y pactar las condiciones del préstamo. Si el Girona quisiese alinearle contra los blaugranas, tendría que abonar 300.000 euros. Una cifra que no están dispuestos a asumir y que impedirá al cántabro estar en el Lluis Companys.
Saltan chispas antes del derbi
Estas declaraciones de Xavi son una más de las polémicas que ha habido entre ambos clubes durante la última semana. El capitán del Girona, Aleix García, reconoció en una entrevista para Movistar que "obviamente me gustaría jugar en el Barça".
Una afirmación que molestó en la afición y entorno del club gironí. De hecho, su propio entrenador le reprochó estas declaraciones en rueda de prensa. "Para mí, Aleix se ha equivocado. Espero que, poco a poco, la gente sea solo del Girona. Este es mi mensaje para nuestra afición. Necesitamos futbolistas 100% del Girona", fue la respuesta del técnico ante la situación. Habrá que ver cómo se resuelve en el campo este conflicto, pero los derbis entre Girona y Barça difícilmente volverán a ser las celebraciones que eran antes.