Luka Doncic ha empezado la temporada regular de la NBA como un tiro. El jugador esloveno no quiere caer a las primeras de cambio esta temporada, por lo que está decidido a llevar a los Dallas Mavericks lo más lejos posible. Sobre el papel, su gran acompañante en este objetivo es Kyrie Irving, base all-star que llegó a Dallas el invierno pasado, pero Irving se ha perdido este inicio de temporada por un problema en el pie, una lesión que ha provocado que Doncic haya mostrado su mejor versión.

Y es que los Dallas Mavericks suman 3 victorias en los 3 primeros partidos de la temporada, y con 3 actuaciones estelares de Doncic. En el primer partido, contra los San Antonio Spurs de Victor Wembanyama, Doncic firmó un triple doble, mientras que contra los Brooklyn Nets, el exequipo de Irving, el esloveno anotó nada más y nada menos que 49 puntos. Y Doncic no terminó ahí, ya que en el siguiente partido, contra los Memphis Grizzlies, anotó 35 puntos, además de lograr 12 rebotes y de dar 12 asistencias.

Doncic quiere más

Y es que después de 5 temporadas en los Estados Unidos en las que Doncic ha acumulado estadísticas individuales espectaculares, el esloveno ya quiere lograr éxitos deportivos, para lo que necesita que sus compañeros le acompañen. "Creo que tenemos un gran equipo, nuevas piezas. Estamos bien. Nos estamos conociendo aún. Creo que es un mejor equipo. Ojalá esta temporada sea especial", afirmó el jugador antes de empezar el curso actual.

"El baloncesto internacional está creciendo. Dos MVP, ahora viene Wembanyama, estoy feliz de que esto pase. Lo mental es muy importante. Sobre todo cuando tienes un mal partido y cómo salir de eso. Sé que puedo jugar y sigo haciendo las cosas que hago todos los días", añadió.

Doncic teme quedarse atrás

Y es que Doncic ya no es aquel joven de 19 años que aterrizó a la NBA. Sigue siendo muy joven, solo 24 años, pero ya tiene 5 años de experiencia en la NBA. "Ahora puedo hablar más con los periodistas. Tengo más barba", recuerda. El problema es que Doncic ve como pasan los años, llegan nuevas estrellas, como Wembanyama, y los Mavericks no despegan.

Se supone que su gran acompañante, el jugador que le debe dar el relevo en los momentos de debilidad, es Irving, pero el base ha empezado la temporada con problemas físicos, lo que ha dejado a Doncic de nuevo solo ante el peligro. El esloveno, de momento, está aguantando él solo el equipo. Falta por ver hasta cuándo.