Diego Simeone ha dicho basta. El técnico del Atlético de Madrid ha perdido la paciencia con uno de los fichajes que más expectativas generó la pasada temporada. Y es que la realidad es que Conor Gallagher no ha sido, ni de lejos, el jugador que el Cholo esperaba cuando dio luz verde a su llegada. Así pues, el mensaje ya ha bajado desde el Metropolitano y si llega una oferta cercana a los 35 millones de euros, hay vía libre para su salida.
La decepción es profunda. Gallagher aterrizó con cartel, energía y fama de centrocampista total, pero su rendimiento ha estado muy por debajo de lo prometido. Ni ha liderado el centro del campo, ni ha marcado diferencias, ni ha sido ese futbolista capaz de cambiar partidos con intensidad y llegada. Simeone lo ha probado en varios contextos, con distintos roles, pero la sensación es siempre la misma: no termina de encajar ni de justificar su peso en la plantilla.
Simeone pierde la fe y abre la puerta
En el cuerpo técnico ya no hay dudas. El Cholo considera que insistir con Gallagher puede convertirse en un problema mayor a medio plazo. Y es que mantener a un jugador caro, sin impacto real y con mercado todavía activo, sería un error estratégico. Por eso ha pedido al club que no se cierre en banda y que escuche propuestas serias, especialmente si llegan desde Inglaterra.

La Premier League sigue viendo en Gallagher a un futbolista recuperable, con físico, recorrido y experiencia. En el Atlético lo saben y por eso el plan es claro: vender ahora, antes de que su valor se deteriore todavía más. Los 35 millones no son un capricho, sino una cifra pensada para minimizar pérdidas y cerrar una etapa que apunta a frustración continua.
La Premier, la vía de escape ideal
El regreso a Inglaterra es la opción preferida por todas las partes. Gallagher se siente más cómodo en ese contexto, y el Atlético considera que allí pueden pagar un traspaso razonable. Varios clubes de la zona media-alta de la Premier ya han preguntado por su situación, conscientes de que Simeone ya no lo considera imprescindible. La realidad es que en el Metropolitano no quieren repetir errores del pasado, reteniendo jugadores por orgullo o esperando milagros que no llegan. Simeone ha sido claro con la dirección deportiva: mejor cortar ahora que arrastrar el problema otra temporada más. Y esta vez, el club está dispuesto a escuchar.
Así pues, Gallagher apunta a ser uno de los nombres propios del próximo mercado. Llegó como apuesta fuerte y se va camino de convertirse en una venta necesaria. Porque en el Atlético, cuando el Cholo pierde la fe, no suele haber marcha atrás. Y esta historia, salvo giro inesperado, ya está escrita.