Ousmane Dembélé sigue estando en una situación incierta. Por ahora no hay constancia de que existan conversaciones en marcha para conseguir su renovación con el Barça, pese a que es un tema que debería de resultar prioritario. Sin embargo, las dificultades económicas que siguen encontrándose Joan Laporta y Mateu Alemany dificulta bastante el hecho de que puedan inscribir nuevos contratos, y necesitan paciencia.

Y es que primero deben de conseguir rebajar considerablemente la masa salarial, para no tener problemas. Así que lo único que le piden al internacional francés es que tenga paciencia, y espere todo lo que sea necesario. Hasta el verano no podrán presentarle una oferta en firme, y confían en que se mantenga leal a Xavi Hernández, y no cierre nada con otro club. La intención es prolongar su compromiso más allá de 2024, cuando finaliza el actual.

Por supuesto, también tienen presente que su cláusula de rescisión es de tan solo 50 millones de euros, y eso le hace ser objeto de deseo por parte de muchas instituciones. De hecho, ‘el Mosquito’ y su agente, Moussa Sissoko, están en conversaciones con varios conjuntos que estarían muy interesados en poder llevárselo del Camp Nou. El Paris Saint-Germain parece ser el principal pretendiente del atacante de 25 años, y Nasser Al-Khelaïfi no se olvida de él.

De la misma manera, el Bayern de Múnich ha comenzado a espiar de cerca la situación de Dembélé por petición de Julian Nagelsmann, mientras que el Chelsea de Todd Boehly y el Manchester United de Erik Ten Hag son otros invitados a la subasta. El Barça no lo tendrá sencillo en caso de querer mantener al ex del Borussia Dortmund y del Stade Rennais en la plantilla, y necesitan un milagro. Pero no pierden la esperanza ni la ilusión.

Nagelsmann Bayern EFE
Julian Nagelsmann/ EFE

Creen que tienen muchas posibilidades, ya que el futbolista ha asegurado que se encuentra muy feliz en España, donde lleva residiendo casi seis años.

Dembélé, a punto de reaparecer

Laporta y Alemany no descuidan este asunto, y confían en poder llegar a una solución amistosa, y evitar que Dembélé acabe haciendo las maletas. Pero en estos momentos la prioridad del campeón del Mundial de Rusia es otra, y espera reaparecer lo antes posible.

De momento, ya ha comenzado a ejercitarse sobre el terreno de juego, y es optimista con la posibilidad de estar nuevamente disponible para el Barça antes de que finalice el mes de febrero, aunque sea arriesgado.