Dana White no ha tenido el año que esperaba. Aunque la UFC ha seguido creciendo, no oculta la decepción por la increíble cantidad de peleas que se han tenido que cancelar por culpa de lesiones de última hora, y que han provocado una pérdida de ingresos importante. Y la más destacada fue la de Islam Makhachev contra Arman Tsarukyan, en el mes de enero, que tuvo que cambiarse a última hora, por la baja del peleador armenio, quien sigue sin volver al ring.
También se tuvo que suspender el enfrentamiento por el título entre Shavkat Rakhmonov vs Belal Muhammad, por el título de peso wélter, o la de Dan Hooker vs Justin Gaethje, una de las más esperadas por el público. Aunque, sin ningún tipo de duda, la más dolorosa ha sido la de Jon Jones contra Tom Aspinall, por el cinturón de los pesos pesados, y que prometía ser una de las peleas más vistas y recordadas de todos los tiempos.
Porque mucha gente creía que el peleador inglés tenía el nivel y las habilidades necesarias para imponerse a ‘Bones’, considerado como el mejor de la historia, y que nunca ha perdido en el ring. Pero cuando ya se especulaba con la fecha de este enfrentamiento, White sorprendió a la hora de comunicar en rueda de prensa que el polémico luchador norteamericano le había comunicado que se retiraba, dejando su cinturón vacante, y que pasó a ser propiedad del británico, quien tenía el cinturón interino, y esperaba su oportunidad por el título.
Aspinall defenderá por primera vez su condición de campeón indiscutido en tres semanas, contra Ciryl Gane, una pelea donde es el claro favorito. Y la intención de Dana es que su siguiente defensa de título llegue en el primer semestre, nada más y nada menos que en la Casa Blanca. Y el rival que tiene en mente es Alex Pereira, una de las caras más solicitadas dentro de UFC, gracias a su estilo tan entretenido para los espectadores, por su facilidad para noquear a los oponentes.
‘Poatán’ recuperó su cinturón el último fin de semana, vengándose de Magomed Ankalaev, y proclamándose como el rey del peso semipesado, donde ahora mismo no tiene un claro rival a superarle. Y la intención es que suba al peso pesado.
Dana White prepara una pelea entre Aspinall y Pereira en la Casa Blanca
Dana White cree que la mejor pelea que se puede ver en estos momentos sería entre Aspinall y Pereira, y tiene previsto que se produzca en la Casa Blanca, debido al deseo de Donald Trump, fiel seguidor de la UFC, a organizar una velada allí.
Ilia Topuria contra Makhachev sería otra de las opciones, aunque se tendrían que cumplir una serie de condiciones para que se celebre, y que hace que sea más complicado.